vitoria. El número de familias alavesas que ha recibido dinero de Cáritas en los once primeros meses del año para hacer frente a una situación económica precaria se ha elevado a 924, un 77% más que en 2007. Cáritas presentó ayer estos datos, que avalan, a juicio de esta institución, que “la crisis económica se ha instalado en territorio alavés”. El perfil de las personas atendidas son inmigrantes que han perdido su empleo en otras comunidades o que están en situación de especial vulnerabilidad por la necesidad de mantener un empleo imprescindible para la renovación de sus papeles. Asimismo, se han acercado a Cáritas familias que empiezan a enfrentarse a serias dificultades económicas.

A la vista de estos perfiles, Ignacio Loza, director de Cáritas, explicó que “la crisis se ha cebado con los que menos tienen”. En los once primeros meses de 2008, Cáritas ha aumentado un 41% el número de expedientes abiertos, que se han elevado a 7.268, aunque sólo una parte reciben dinero.

No todas las personas que se acercan a los despachos de Cáritas son, finalmente, atendidas por esta institución, ya que han sido derivadas a los servicios sociales o se acercan sólo a preguntar, según precisó Ramón Ibeas, secretario general de la organización en Álava.

Las ayudas económicas concedidas han crecido más, un 77%, y se han visto beneficiadas de las mismas 924 familias. Como consecuencia, el gasto de esta institución en ayudas económicas ha crecido un 67% y se ha elevado a 415.035 euros. En 2007, este gasto supuso 248.035 euros.

En vista del incremento de la necesidad de ayudas, Cáritas planteó una reflexión de cara a la Navidad e invitó a reforzar las relaciones interpersonales. Las comunidades parroquiales presentarán el próximo día 21 una campaña en este sentido. Asimismo, se presentarán nuevos presupuestos al consejo para hacer frente al incremento de ayudas y reforzar el programa de inserción laboral.