DEMOGRAFÍA

España es el segundo país de la UE que recibe más inmigración

El Periodico, , 16-12-2008

EL PERIÓDICO
BARCELONA

España es en términos absolutos el segundo país de la Unión Europea que ha acogido más inmigrantes en el año 2008, solo por detrás de Italia, y el quinto en términos porcentuales, superando a la propia Italia y solo por detrás de cuatro pequeños estados (Irlanda, Eslovenia, Luxemburgo y Chipre). Según muestran las proyecciones de la oficina de estadística Eurostat para el 1 de enero del 2009, la población española aumentará concretamente en 464.300 habitantes gracias a la inmigración y otros 105.500 gracias al crecimiento natural de la población (nacimientos menos defunciones), lo que supone un total de 569.700 (un 12,5 por 1.000 con respecto al 2007).
En su previsión para el 1 de enero, Eurostat destaca que la UE habrá aumentado su población conjunta con respecto al 2007 en 2,2 millones de habitantes y estará a punto de superar por primera vez la cifra simbólica del medio millardo (499,7). Los seis grandes serán, por orden, Alemania (82 millones), Francia (64,1), Reino Unido (61,6), Italia (60), España (45,8) y Polonia (38,1). El peso de la inmigración es muy superior al del crecimiento natural a la hora de lograr el balance demográfico positivo. De hecho, hay varios países, como Alemania e Italia, que perderían población si no fuera por la llegada de ciudadanos extranjeros.

LOS QUE MÁS PIERDEN
En términos porcentuales, el país de la UE que más se despuebla es de forma destacada Bulgaria, con un descenso del 4,5 por 1.000 en un año, seguido de dos repúblicas bálticas (Letonia y Lituania) y Hungría, mientras que el de mayor crecimiento es Irlanda, que aumenta un espectacular 26,1 por mil. El tigre celta combina el mayor crecimiento natural de la población de toda la UE, fruto de una elevada natalidad (18,1 por mil) con el mayor crecimiento de la inmigración (14,1 por mil).
Según las previsiones de Eurostat, el número de nacimientos en toda la UE ascenderá en el 2008 a 5,4 millones, cifra que corresponde a una tasa de natalidad bruta del 10,8 por 1.000. España supera ligeramente la media y se sitúa en el 11 por 1.000. Tras Irlanda, la tasa de natalidad más elevada corresponde al Reino Unido y Francia. La natalidad más baja la registran Alemania, Malta, Austria, Bulgaria e Italia.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)