"Las condiciones laborales de mujeres inmigrantes, en muchos casos, no distan de la neo-esclavitud"
Diario de noticias de Gipuzkoa, , 15-12-2008DONOSTIA.En la asociación trabajan con mujeres. Pero, ¿cuál cree que es la situación de los inmigrantes, en general?
La situación actual es muy complicada. De todas forma, esto es una constante en las vidas de las personas que se ven obligadas a dejar atrás sus países de origen.
¿Cuál es el objetivo de su trabajo en colaboración con las demás asociaciones en este encuentro?
Buscamos crear un espacio en el que poder reivindicar nuestras ideas, un espacio donde podamos hablar con voz propia. Todos y cada uno de nosotros somos sujetos sociales y políticos y, por ello, entendemos que lo que pensemos o debatamos tiene que ser escuchado.
¿Y cuál es el objetivo, concretamente, de Malen Etxea?
Desde la asociación tenemos un objetivo y una lucha muy marcadas: hacer visible la situación de las inmigrantes ilegales que trabajan como empleadas domésticas internas. Las condiciones laborales de estas mujeres, en muchos casos, no distan de la neo-esclavitud. Deseamos hacer llegar esta realidad a la patronal y hacerles ver que, a pesar de que estas mujeres estén obligadas a vivir en una situación irregular, todas tienen derechos.
¿Cuánto tiempo llevan trabajando por los derechos de las mujeres inmigrantes? ¿Qué frutos han obtenido durante este tiempo?
Comenzamos hace cerca de dos años. Parte de ese trabajo que efectuamos ha obtenido respuesta este pasado julio, cuando firmamos un acuerdo con las sindicales vascas para garantizar las condiciones mínimas de las trabajadoras inmigrantes que no tienen papeles. Pero por el momento, a pesar de que ya lo hayamos divulgado, la patronal no quiere entenderlo.
¿Cree que dentro de la inmigración existe un sector que vive y trabaja en condiciones más precarias?
Las inmigrantes ilegales que trabajan como empleadas domésticas internas son las que padecen las condiciones más precarias.
¿Cuál cree que puede ser la solución a este problema?
Creo que una posible solución podría ser la derogación de la ley de inmigración actual, una ley muy sexista y rígida. Por otro lado, me parece esencial que se garanticen los derechos políticos, económicos y sociales de todas y cada una de las mujeres inmigrantes.
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