Unas 500 tumbas de las 576 que albergan los restos de combatientes musulmanes de la primera guerra mundial fueron profanadas en la noche del domingo al lunes en el cementerio militar de Notre – Dame – de – Lorette, en Arras (norte de Francia). Las lápidas fueron embadurnadas con pintura negra con expresiones contra el islam, insultos racistas, cruces gamadas y en alguna apareció el nombre de la ministra de Justicia, Rachida Dati, de origen magrebí.
Para que la afrenta fuera mayor, los autores eligieron el día en que los musulmanes celebran el Aid el – Kebir o fiesta del cordero. Esta es la tercera vez en dos años que se produce un hecho similar. El pasado mes de abril, 148 tumbas de este mismo cementerio aparecieron con inscripciones injuriosas contra el islam y otras 52 fueron profanadas un año antes.

TUMBAS JUDÍAS
Esta vez, aparte de los 500 tumbas musulmanas, también sufrieron daños entre 15 y 20 de los 60 enterramientos judíos existentes, aunque en las lápidas no había expresiones antisemitas, según la Gendarmería. El presidente Nicolas Sarkozy calificó los hechos de “racismo repugnante”.
Por las profanaciones de abril fueron detenidos dos jóvenes nazis, que acaban de salir en libertad bajo control judicial tras ser encarcelados en septiembre. El cementerio de Notre – Dame – de – Lorette fue inaugurado en 1925 y acoge a 40.000 combatientes de la gran guerra.