MEZCLA de sabores internacionales, una fusión que permite que los paladares más exquisitos se deleiten y vivan una experiencia culinaria alrededor del mundo. Los platos más representativos de cada país pueden ser una transparencia cultural. No obstante, para degustar los menús más representativos del Globo no hace falta salir de la capital foral. En Pamplona existen restaurantes internacionales más allá de italianos, mejicanos o chinos.

Carne de canguro, frango (pollo), arepa (pan de maíz) o brühwurst (salchichas escaldadas) son algunos de los alimentos que se pueden encontrar en las cartas de los restaurantes menos conocidos por los pamploneses. “Nuestros clientes son más o menos fijos. Alguno viene de oídas, aunque predominan los comensales latinos o portugueses”, asegura Lina Martínez, camarera del restaurante colombiano Sabor y Tumbao. Uno de los menús estrella de este local, denominado bandeja paisa, consiste en un híbrido de alubias rojas, arroz, panceta, huevo, aguacate, carne molida y arepa. “Aconsejamos a los clientes nuevos qué comer, ya que no están acostumbrados a las salsas”. Otro de los rincones culinarios menos conocidos es el dominicano bar Badar. “Las habichuelas son esenciales en nuestra dieta. Las cocinamos como si fuera sopa espesa y las servimos con arroz”, explica Rosanna Zarzuela, la cocinera.

Especias en la mesa

La comida hindú se caracteriza por su relación con especias diversas como tomillo, romero o hinojo. “Disponemos de menús degustación porque mucha gente viene a probar”, aseguran desde Taj Mahal. Disponen de tandoor, horno típico de barro natural de la India, donde cocinan la mayor parte de las carnes que sirven. “Las maceramos previamente con una mezcla de yogur y especias”. Según dicen sus camareros, el arroz basmati, el curry y el ghee (especie de mantequilla),son algunos de los guisos más demandados. La comida árabe también tiene cabida en la capital. En el restaurante Alsafir los comensales pueden disfrutar de alimentos como falafel (garbanzos), cus – cúso tajin(estofado que toma el nombre del recipiente de barro donde se prepara). “Los occidentales están poco acostumbrados a estos alimentos”, sostienen los propietarios.

Platos especiales

Pero a pesar de la variedad, puede haber impedimentos. Los celiacos padecen intolerancia al gluten, por lo que se ven obligados a evitar alrededor del 70% de los alimentos comercializados porque llevan como ingrediente trigo, cebada, centeno o avena. Hoy día, en Pamplona esta patología puede dejar de ser un problema. El restaurante italiano La Bottega, cerrado hoy día, fue uno de los primeros en disponer de menús para estos enfermos, del mismo modo que actualmente lo ofertan el restaurante Baserri o el Sarasate. “La gente agradece poder comer sin preocuparse”, comenta Javier Esparza Martínez desde el restaurante Baserri.

Otra de las variedades que contempla la capital es ofrecer menús para vegetarianos. Desde 1979 el restaurante Sarasate ofrece esta posibilidad. "Es una opción cada día más en auge. Ofrecemos seitan, la llamada “carne vegetal” que se obtiene por extracción del gluten de trigo para hervirla en salsa de soja y algas", afirman los camareros. “Es una alternativa a crisis. No viajas, pero comes como en otro país”, bromea Alberto Orosco, de 36 años.