Las fuerzas castrenses de México y Guatemala enviaron refuerzos a la frontera, para intentar la captura de los narcotraficantes que protagonizaron una matanza que dejó 17 fallecidos. Sin embargo, los mafiosos habrían logrado evadir el cerco, ya que ayer se localizó en Chiapas, México, un vehículo con fusiles que posiblemente fueron usados en el enfrentamiento.

La frontera sur para México ha significado desde hace años un sector que requiere mayor seguridad, debido a la cantidad de inmigrantes y delincuentes que llegan desde Centroamérica, pero desde el lunes último, debido al ataque entre narcotraficantes, el Gobierno de ese país ordenó reforzar esa área.

Sin embargo, esa tendencia parece haberse revertido, y hoy es el Ejército de Guatemala el que ha enviado refuerzos a la zona, debido al ingreso de narcotraficantes mexicanos y para evitar la fuga de quienes protagonizaron la masacre perpetrada en la aldea Agua Zarca, Santa Ana Huista, Huehuetenango.

La frontera con México tiene 976 kilómetros y unos 113 puntos ciegos, lo cual la hace amplia y permeable.

El ministro de Gobernación, Francisco Jiménez, afirmó que actualmente se han destacado en el lugar entre 70 y 80 policías, a quienes se suma un contingente militar

Afirmó: “Estamos evaluando la permanencia y qué tipo de acciones se van a trabajar en el lugar; es una decisión que debe tomar el Consejo Nacional de Seguridad. También el Consejo evaluará si se solicita un estado de Prevención”.

El Ejército se moviliza de manera conjunta con la Policía. Una compañía de infantería de cien efectivos, entre oficiales superiores, subalternos, tropa de seguridad ciudadana y kaibiles, patrullan el área de los hechos.

Jorge Ortega, vocero castrense, informó: “Nuestras unidades estarán fijas y permanentes, y harán patrullajes constantes en las fronteras. Las áreas periféricas se refuerzan, como parte de un operativo normal, cuando ocurren eventos como el del domingo (recién pasado)”.

Según trascendió en medios electrónicos, México destinó a miembros del Ejército, Policía Federal y Policía Estatal Fronteriza a la zona de la masacre.

Las autoridades mexicanas sellaron los municipios de Frontera Comalapa, La Trinitaria, Las Margaritas, Motozintla y Maravilla Tenejapa, México, cercanos a Agua Zarca.

A pesar de los controles para evitar la fuga de quienes perpetraron la masacre, éstos habrían escapado hacia territorio mexicano.

Un ejemplo de esa posibilidad es que autoridades de Chiapas localizaron una camioneta agrícola marca Toyota Runner, con matrícula guatemalteca, que transportaba proyectiles para fusiles AR 15 y AK – 47.

La directora de la Policía Nacional Civil, Marlene Blanco Lapola, afirmó que, debido a la tardanza de un juez para autorizar las órdenes de allanamientos, las autoridades debieron esperar un día más para efectuar las seis inspecciones.

En los cinco cateos de ayer se hallaron cuatro vehículos, posiblemente relacionados con la matanza.

Blanco afirmó que entre los muertos se podría encontrar un ciudadano mexicano que era buscado por la Policía de ese país.

Por aparte, el fiscal general Amílcar Velásquez afirmó que el supuesto mexicano que fue capturado e identificado como Hugo Morales González podría ser el narcotraficante alias el Amarillo, quien el 30 de agosto último fue perseguido y capturado por la policía antinarcótica de Guatemala, en un barranco de la zona 2, pero posteriormente fue dejado en libertad.

En esa oportunidad se identificó como Alejandro García o Raúl Treviño López, pero su nombre podría ser Flavio Méndez Santiago.

Un trabajador de la Procuraduría General de la República de México comentó por teléfono que aún no han recibido la solicitud de las autoridades guatemaltecas, pero cuando eso suceda, se enviará la identificación y los antecedentes del detenido.

La Fiscalía informó que las investigaciones continúan en las escenas del crimen de Huehuetenango, y que su demora se debe a que son complejas, por la cantidad de personas muertas, el tipo de armas usadas, los autos hallados y el tipo de ataques.