Tres personas de nacionalidad peruana, de las cuales se desconoce la identidad, denunciaron haber sufrido agresiones en su propia casa durante la madrugada del sábado al domingo, lo que se suma al incidente que sufrieron otros dos compatriotas, A.?Z.?C?., de 41 años, y E.S.L., de 28, horas más tarde, al ser golpeados brutalmente por cuatro jóvenes que se bajaron de un Citroën ZX en la rúa Pedra Sartaña sobre las ocho de la mañana. Según parece, ambos hechos están relacionados.

Al parecer, las víctimas se encontraban en su vivienda después de haber pasado la noche divirtiéndose por la villa cuando cuatro jóvenes llamaron al portal del inmueble. Los peruanos abrieron la puerta y fueron presuntamente agredidos por los muchachos. El hecho de que un inmigrante conociera a alguno de los agresores hizo que la pelea no fuera a más.

Los hechos denunciados ahora apuntan a que el motivo que indujo a los cuatro jóvenes a subir al piso de los peruanos fue el ánimo de venganza. Al parecer, lo que comenzó en el bar de la estación de autobuses de Noia por unas palabras salidas de tono de uno de los inmigrantes hacia la mujer de uno de los presuntos agresores – que en ese momento, junto con dos amigos más, decidió limpiar el honor de su pareja, lo que dio lugar a una reyerta en el local – continuó minutos después no solo en la calle, sino también en el propio domicilio de los tres hombres de nacionalidad peruana.

Aunque el caso sigue abierto, tanto fuentes municipales como de la investigación han descartado que los incidentes se deban a un brote racista, puesto que uno de los presuntos agresores, a los que las fuerzas del orden ya tienen identificados, es conocido por su facilidad para participar en peleas. Se da la circunstancia de que es la primera vez, al menos que se tenga conocimiento, que la agresión recae sobre inmigrantes.