| NUEVA YORK, EE.UU.

Ejecutivo del  condado Long Island (EE.UU.) hace un ‘mea culpa’ por crimen de azuayo.
 
En una carta dirigida al diario neoyorquino Newsday, publicada en la edición de ayer, el ejecutivo del condado de Suffolk, Steve Levy, se retractó de sus declaraciones iniciales en las que negaba que el asesinato del  ecuatoriano Marcelo Lucero fuera un crimen de odio.

En un comunicado oficial que llegó al citado rotativo el martes último, Levy  criticó la cobertura de la prensa sobre la muerte de Lucero, ultimado en Patchogue, Long Island, por una pandilla de jóvenes que estaba “cazando mexicanos” entre la noche del sábado 8 y madrugada del domingo 9 de noviembre pasados.

“No puede llamarse crimen de odio a la muerte de un ecuatoriano. Es solo la historia de un día cualquiera”, dijo Levy en una declaración oficial y en entrevistas para los medios desde que se conoció del asesinato. Agregó que no existían nexos entre su campaña contra la inmigración ilegal y la muerte del ecuatoriano.

Recién el jueves se arrepintió de sus expresiones y le escribió al Newsday la misiva en que dice que “el horrible incidente (el asesinato de Lucero) es algo más que la historia de un día. Es un aviso de cuán lejos podemos llegar como sociedad”.

En su comunicado Levy informó que para este domingo convocará a una reunión pública con el fin  de  hablar sobre las circunstancias del crimen y las medidas para terminar con los ataques raciales. A la cita, según la oficina de Levy, se ha convocado a las autoridades ecuatorianas y a las organizaciones comunitarias pro inmigrantes.

Newsday dedicó ayer su portada al cambio de actitud de Levy y las reacciones no se hicieron esperar. Para el diario, la carta contiene “un raro mea culpa”, lo cual fue corroborado por el comisionado (concejal) por Holbrook, William Lindsay, quien sostuvo que “Levy nunca reconoce un error para mostrar que es un tipo duro”.

El asambleísta del estado de Nueva York por Islip, Long Island, dijo que se hallaba “sorprendido del tono moderado de Levy. Es alentador que él haya reconocido que las palabras cuentan”.

El activista pro inmigrante reverendo Allan Ramírez, pastor de la Iglesia Reformista de Brookville, quien acusó el lunes a Levy de “tener sus manos ensagrantadas”, se mostró ayer optimista por el contenido de la carta. “Es un buen primer paso. Seguramente se ha dado cuenta de que para obtener una dosis de perdón tiene primero que reconocer sus culpas”.

Patrick Young, director del Centro para los Refugiados Centroamericanos en Long Island, no dio  crédito alguno a Levy. “Si lamentara de verdad sus palabras, se hubiera arrenpetido antes, Quizás se haya dado cuenta de que estamos frente a una crisis moral grave en el condado y de que tiene que controlarse antes de hablar”, fue su reacción.

Cuenca
Desde la tarde de ayer en la ciudad de Cuenca estaba prevista la realización de varios actos y una vigilia por el crimen de Marcelo Cabrera.

Nueva York
Asociaciones y entidades preveían organizar anoche una vigilia en Nueva York, donde cayó muerto el migrante gualaceño (Azuay).