Continúa la llegada de embarcaciones clandestinas a las costas canarias, aunque esta vez sin que se lamentasen víctimas fatales. El cayuco fue divisado la mañana de ayer en la zona de Las Galletas, al sur de Tenerife, y finalmente alcanzó la costa por sus propios medios al muelle de Amarilla Golf, en el municipio de San Miguel de Abona.

Aunque en un principio se habló de que transportaba a 50 irregulares, finalmente la cuenta se redujo a 45 inmigrantes clandestinos, diez de ellos posibles menores, según informó la Delegación del Gobierno en Canarias.

El estado de los inmigrantes no presentaba dificultades, por lo que ninguno de ellos debió ser trasladado a centros hospitalarios de Tenerife. La cifra de menores se confirmará cuando se concluyan las pruebas óseas que se realizan en estos casos.

La barcaza alcanzó la costa tinerfeña pasadas las 12 del mediodía y sus ocupantes fueron atendidos por personal del Servicio Canario de Urgencias y Guardia Civil.

El hecho sucede tres días después de que llegaran al puerto de La Restinga, en la isla de El Hierro, los 123 ocupantes de un cayuco con dos muertos. En el interior de la barcaza fue hallado el primer cadáver, que llevaba muerto entre ocho y diez horas.

El segundo perdió la vida minutos después en las instalaciones portuarias. Una parada cardiorrespiratoria acabó con su vida.

Intento de homicidio

Por otra parte, ayer se supo que un joven natural de Gambia, presunto patrón de un cayuco que llegó a El Hierro el pasado día 10, ha sido detenido como supuesto autor de un intento de homicidio que se produjo en el centro de acogida temporal de inmigrantes de esa isla, informó ayer la Guardia Civil.

Según se indicó en un comunicado de la Benemérita, el joven detenido, de 18 años, fue sorprendido por un agente de servicio cuando advirtió que éste estaba intentando estrangular a otro interno de 22 años y de la misma nacionalidad.

El agredido estaba semiinconsciente y presentaba un corte en la mejilla derecha, por el que recibió tres puntos de sutura, y fue atendido en el Hospital de la capital herreña, Valverde antes de regresar al centro de acogida para inmigrantes. La investigación está bajo secreto de sumario.