Aunque comprometidos con el tripartito, EUiA y su socio de coalición ICV no votarán sin cambios sustanciales la ley de educación que el Govern ha pactado con CiU y que la próxima semana empezará a debatirse en el Parlament. De hecho, EUiA critica por sociovergente y contraria al acuerdo de Entesa la política de pactos nacionales con la que José Montilla busca acercarse a CiU en grandes cuestiones. EUiA es asimismo más beligerante que el president en lo que respecta a la crisis y a expedientes de regulación de empleo (ERE).
Así lo expuso ayer Jordi Miralles al abrir la 5ª asamblea nacional del referente catalán de IU, que se celebra este fin de semana en el hotel Barceló Sants bajo el lema EUiA. Més forta. Més útil. Sempre a l’esquerra y que le reelegirá hoy como líder, por última vez, al frente de una lista única.
Como ya alertaron el miércoles los ecosocialistas, el comunista Miralles remarcó que su oposición a la ley de educación “no es una pose” para marcar perfil en sus asambleas (ICV hará la suya el 21 de noviembre). Con intención de “que quede claro al PSC y a ERC” – – que no acaban de creerse la amenaza rojiverde – – , el líder de EUiA lo proclamó y repitió ante la prensa y los 645 delegados y 150 invitados de un congreso que votó enmiendas críticas con los pactos nacionales del Govern con CiU.

CARTILLA LEÍDA A LOS SOCIOS
Aunque los ecosocialistas ya han transmitido su postura, reiteradamente y en privado, al PSC, al conseller de Educació, Ernest Maragall, y a Montilla, el líder de EUiA apeló ayer en público a la “máxima responsabilidad del president” para modificar la ley.
Con connotaciones en la calidad educativa y el reparto de inmigrantes en las aulas, el núcleo del conflicto es el concepto “servicio público”, omitido por presión de CiU y la patronal de la escuela concertada. Por ello, Miralles se permitió leer la cartilla a sus socios remitiéndoles a “la página 9 del pacto de Entesa”.
Como primer objetivo de “progreso social y atención a las personas”, el pacto tripartito invocado por Miralles aboga por “desplegar y consolidar el servicio público de educación garantizando los instrumentos y recursos que permitan al sector público lograr la máxima calidad”.
Miralles amplió el toque de atención a Montilla cuando proclamó que EUiA “combatirá la sociovergencia que ejemplifica la ley de educación y la propuesta de copago” en la sanidad pública de la consellera Marina Geli. “Que no nos busquen para gobernar con CiU”, sentenció.

TERMÓMETRO SOCIAL
La llamada a la “movilización” y a la “solidaridad de clase” que Miralles hizo por la crisis y los ERE chocó también con el mensaje de Montilla. El viernes, en un acto del PSC del Baix Llobregat, el president pidió flexibilidad con las multinacionales y recetó más “concertación que conflicto” social.
La intervención, hoy, del comité de empresa de Nissan en la clausura del congreso de EUiA – – al lado de Miquel Iceta (PSC), Joan Ridao (ERC) y Jordi Guillot (ICV) – – puede ser un termómetro de como están los ánimos. Ayer ya lo fueron los aplausos rojiverdes al criticarse en el plenario la subida de tarifas eléctricas, la ley de educación y al exigirse a Barack Obama levantar el embargo a Cuba.

UNIDAD PARA IU
Miralles se felicitó anoche de haber logrado listas unitarias para votar hoy el nuevo consejo nacional de 130 miembros y los 71 delegados de EUiA a la inminente y crucial 9ª asamblea de IU. 11 son del PSUC Viu (afín al PCE) y, la mayoría, del PCC, POR e independientes que apoyarán a Joan Josep Nuet como relevo a Gaspar Llamazares.
Derrotada (por 333 votos contra 86) la enmienda que pedía romper con ICV en las elecciones europeas, Miralles resaltó el mensaje que dará hoy EUiA al votar una resolución que pide a IU “vivir en positivo la pluralidad” y acordar una política y dirección “unitaria” para superar la crisis de la izquierda alternativa.