Decenas de miles de personas se dieron cita ayer en las calles de Roma y en el Circo Máximo, convocadas por el principal partido de la oposición, el Partido Demócrata (PD), para protestar contra la política del Gobierno conservador de Silvio Berlusconi en materia económica, educativa y de inmigración. Centenares de estudiantes y profesores de toda Italia ya se habían quejado por los recortes en la financiación del sistema escolar, aprobados por el Gobierno de centro – derecha.

Los manifestantes denunciaron también las polémicas medidas de Berlusconi para frenar la inmigración, que el centro – derecha suele vincular con el aumento de la criminalidad, pero que desde la izquierda se interpretan como una invitación al racismo. Berlusconi ha propuesto clases separaradas para los hijos de los inmigrantes hasta que aprendan bien italiano.

La asistencia sobrepasó las previsiones de los convocantes, ya que el Circo Máximo, próximo al Coliseo, se llenó una hora después de que empezaran a caminar las dos manifestaciones que terminaron en ese lugar.

En el Circo Máximo intervino el líder del Partido Demócrata, Walter Veltroni, quien subrayó que Italia «es mejor que la coalición que la gobierna». Anteriormente, había señalado a este periódico: «Es una protesta por el Gobierno que tenemos. Es decir «no» a las medidas del Ejecutivo que olvida las necesidades de las familias y las empresas, que no hace nada por el crecimiento económico del país y que se comporta con arrogancia en el Parlamento».

Los manifestantes corearon eslóganes contra Berlusconi y canciones populares tradicionales de la izquierda. En la manifestación se vieron pancartas con el nombre de Obama, cuyo lema: «Yes we can» (Sí, podemos), se parece al de Veltroni: «Si puo fare» (Se puede hacer), en los comicios de abril pasado, cuando Berlusconi obtuvo la mayoría absoluta.