Un vecino de Irun fue arrestado junto a otras siete personas de Marruecos, Colombia, Argelia, Angola y Pakistán

Donostia. Miembros del Cuerpo Nacional de Policía y la Guardia Municipal de Irun llevaron a cabo en la noche del pasado viernes una operación conjunta contra el tráfico de estupefacientes, la inmigración irregular y otros delitos, en las calles Hondarribia y Pinar de la citada localidad guipuzcoana. Este operativo se saldó con un total de ocho detenidos, dos establecimientos precintados y la incautación de varios objetos, entre ellos quince gramos de cocaína, según indicó ayer el Ayuntamiento de Irun en un comunicado.

El Consistorio informó de que la operación comenzó a las 20.30 horas con el corte del tráfico rodado y de peatones en las dos calles y se prolongó hasta las 23.30 horas. En ese intervalo, agentes de ambos cuerpos policiales registraron un total de ocho bares, dos de los cuales quedaron precintados por la Policía Local.

vecino de irun El primero de ellos, situado en la calle Hondarribia, quedó clausurado al ser detenido su dueño como presunto autor de un delito de tráfico de estupefacientes. El segundo de ellos, ubicado en la calle Pinar, quedó precintado por “carecer de licencia municipal de apertura y no cumplir las normas de higiene y salubridad”.

Uno de los detenidos es un vecino de Hondarribia de 50 años de edad, J.L.R., propietario de uno de los establecimientos y arrestado como presunto autor de un delito de tráfico de estupefacientes. Los otros siete son extranjeros de distintas nacionalidades (Marruecos, Colombia, Argelia, Angola y Pakistán), detenidos por estancia irregular en Euskadi.

Otra veintena de personas fue trasladada a Comisaría para su identificación “al carecer de ningún documento acreditativo en el momento de la actuación”. En la misma operación fue localizado un menor de edad que ha sido derivado a los Servicios Sociales del Gobierno Vasco.