ROMA. El penoso espectáculo que dieron los «tifosi» de la «Nazionale» italiana el pasado sábado en Sofia ha llevado a la Federación italiana de fútbol a tomar una decisión drástica: no habrá entradas para quienes quieran seguir a la formación de Marcello Lippi.
La violencia en el fútbol italiano se ha convertido en una noticia cotidiana en Italia, que ha provocado la prohibición de viajar a muchos ultras para seguir a sus equipos en suelo italiano. Hasta ahora, a nivel de selección no se habían visto escenas como las ofensivas del pasado sábado, cuando Italia jugaba ante Bulgaria uno de sus partidos de calificación para el mundial de Sudáfrica.
Allí, varios «tifosi» quemaron banderas búlgaras mientras cantaban marchas nazis y hacían saludos ofensivos. Dichos actos llevaron a la detención de tres de los «tifosi», que quedaron después en libertad. Los jugadores «azzurri» expresaron un unánime «basta a la violencia, y sobre todo, basta de unir fútbol y política». La Federación, como primera medida, va a prohibir a los ultras viajar con la selección.
Capello quiere a Madrid
Por su parte, el seleccionador de Inglaterra, el italiano Fabio Capello, se ha desmarcado de la polémica sobre la negativa de la federación inglesa a jugar en el Bernabéu por motivos racistas. «La afición de Madrid, mi casa, es estupenda», dijo.