La Comisión de Control y Disciplina de la UEFA impuso ayer una durísima sanción al Atlético de Madrid por los incidentes en su estadio antes y durante el partido contra el Olympique de Marsella el 1 de octubre, correspondiente a la Liga de Campeones. Dos partidos de clausura del Vicente Calderón y 150.000 euros de multa por lo que considera «falta de organización y seguridad» y «conducta impropia de sus aficionados».

El máximo organismo europeo culpa a la policía de «reacción violenta» contra los ultras del Olympique en los prolegómenos del encuentro, acusa a los seguidores del Atlético de haber proferido gritos racistas contra futbolistas negros del equipo francés, y también ha sancionado al entrenador, Javier Aguirre, con dos partidos por sus insultos al delantero Valbuena.
A la espera del recurso de apelación que podrá presentar el Atlético hasta el viernes, el equipo rojiblanco no podría disputar en el Calderón su próximo partido de la Champions, el miércoles día 22, contra el Liverpool, en el esperado regreso de Fernando Torres, y el siguiente frente al PSV Eindhoven, el 26 de noviembre. Tendría qu ejugar esos partidos a «más de 300 kilómetros» de Madrid.
También amenaza al Atlético con la clausura de su estadio por un tercer partido en el caso de que durante los próximos cinco años sucedan incidentes similares. La Comisión de Disciplina denuncia que «hubo un exceso de violencia injustificada por parte de la policía hacia los seguidores del Marsella, que tuvieron un comportamiento pacífico», «gritos racistas, con sonidos de monos», contra dos jugadores del Olympique, «falta de escolta para el equipo francés» e incluso «una agresión a un periodista negro».
«Los incidentes fueron provocados por la policía española sin ninguna razón», adujo el portavoz de la UEFA, que recuerda que «no es la primera vez» que la policía se excede en los estadios españoles. Como ejemplo, apuntó que «hace dos temporadas hubo problemas en Sevilla con hinchas del Tottenham, incluyendo golpes violentos a personas discapacitadas». El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, defendió la actuación policial.
«Jugaremos en casa»
Mientras el Atlético trabaja en el recurso, el presidente rojiblanco, Enrique Cerezo, aseguró que «jugaremos en el Calderón, porque no hemos hecho absolutamente nada que nos impida hacerlo. No hubo nada anormal. La policía cargó contra un grupo de aficionados del Marsella y el Atlético de Madrid no tiene que decir a la policía lo que tiene que hacer. Si el presidente de la UEFA tiene algo que ver, es para pensárselo. Platini es una persona justa y honrada y sabrá atajar este asunto».
Enrique Cerezo también se queja de que el escrito remitido por el Olympique a la UEFA e insiste en que «no hubo gritos de racismo».
Por su parte, el Liverpool lamenta lo tardío del fallo y su preferencia por jugar en Madrid dya que la mayoría de sus hinchas ya tienen los billetes y el alojamiento pagados.Cree que jugar a 300 kilómetros ocasionará problemas de control y seguridad y aumentará el gasto de su hinchada. COLPISA