P. Manzano

MADRID – Los datos ofrecidos ayer por el Gobierno en la Comisión parlamentaria de Trabajo e Inmigración muestran que más de 500.000 inmigrantes han obtenido la tarjeta de residencia en los nueve primeros meses de 2008. De confirmarse esta tendencia, que acabaría con cerca de 700.000 nuevas personas que tienen papeles para vivir en España, estaríamos ante el tercer año, tras 2005 y 2007, en el que más personas han conseguido la tarjeta de residencia. Una situación que, a juicio del diputado popular Rafael Hernando, contradice «las palabras del Gobierno, que habla de impedir que entren camareros, albañiles o personal de servicio en casa».

De hecho, según los datos ofrecidos por Trabajo, se ha pasado de los 3.979.014 extranjeros con permiso de residencia de 2007 a los «más de 4.500.000 que había en los nueve primeros meses de 2008», explicó la secretaria de Estado de Inmigración y Emigración, Consuelo Rumí. Para el PP, se «trata de una regularización masiva y encubierta. A pesar de los discursos, hoy hay medio millón más de extranjeros viviendo en España».

Con estos números, España se mantiene a la cabeza de Europa en cuota de inmigrantes. «El 11,3 por ciento de la población en este país es extranjera (datos del padrón), de ella, el 9,9 por ciento tiene tarjeta de residencia», explica Hernando. Sin embargo, «la cifra de inmigrantes en Gran Bretaña es de un 9,3 por ciento, mientras que en Alemania y Francia se llega al 8,8 y 8,1 respectivamente», concluye.

Convenios y repatriados

Por su parte, Rumí también ofreció datos sobre repatriaciones (el camino de vuelta para los que ya vinieron). «A fecha 8 de octubre, 32.752 inmigrantes clandestinos han sido repatriados a sus países de origen este año», unos datos que, a su juicio, «ponen de manifiesto que este es el periodo en el que más repatriaciones se han hecho y a más sitios».

La secretaria de Estado explicó que estas repatriaciones han tenido lugar gracias a los convenios con los países de origen y a la actividad del Ministerio del Interior, que cuenta con un presupuesto de 95 millones de euros para los asuntos de extranjería. «Tenemos una excelente colaboración con países como Senegal y Marruecos, donde gracias a esa relación se está deteniendo todos los días a mafias y redes de tráfico de inmigrantes», señaló Rumí, para añadir que la labor de Interior en este sentido ha sido y es «excelente».

En 2007, un total de 55.938 personas fueron devueltas a sus países de origen a través de retornos, readmisiones, expulsiones y devoluciones, frente a los 52.814 inmigrantes del año anterior, según las cifras de Interior. Desde que el PSOE llegara al Gobierno en 2004, cerca de 400.000 extranjeros clandestinos han sido enviados de vuelta a sus países.



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