Cáritas afronta hoy la campaña de temporeros con la apertura de su ropero y el centro de acogida
La institución insiste en la necesidad de diferenciar a los transeúntes de las personas que buscan contrato laboral
El Correo, , 06-10-2008‘Él necesita de ti y tú de él’ es el lema bajo el cual se desarrolla, desde hoy y hasta el día 17, la campaña de temporeros de Cáritas Parroquial en la comarca jarrera, según anunciaron los responsables de la institución que vuelve a ofertar a los trabajadores que participan en las campañas agrícolas «atención y seguimiento de cada una de las personas que soliciten ayuda» durante su estancia en Haro a través del Centro de Acogida, y ropa de abrigo.
Como en anteriores ediciones, Cáritas requiere de los beneficiarios de ambos departamentos (el Centro de Acogida permanecerá abierto de lunes a viernes entre las 11 y 12 horas en la planta baja de la Casa Parroquial, y el Ropero de lunes a viernes entre las 10.30 y 19.30 horas) una «contraprestación». Consistirá en la aportación de su trabajo, realizando alguna labor comunitaria de limpieza o arreglo de deterioros advertidos en el municipio por espacio de una hora.
Se pretende con ello, indica en su comunicado la dirección de la ONG, que su servicio «no sea concebido como una limosna sino el pago digno a su esfuerzo».
Para poder aportar los medios que reclaman las personas que llegan a la región en busca de un contrato laboral de temporada, Cáritas demanda de la población jarrera colaboración personal participando en los diferentes grupos de apoyo que llevan a cabo esta labor; dinero, ropa o calzado, siempre a través de la propia entidad que coordina la prestación de estas ayudas; y, en buena medida, coherencia para no dar limosna al ser abordada en la calle o en la entrada a las iglesias.
Sensibilización
Se trata de un planteamiento que responde al segundo frente en el que se centra la campaña, la sensibilización de los ciudadanos ante este colectivo que, según destaca en sus todos sus trípticos informativos, nunca debe ser confundida con los transeúntes que, advierten en sus comunicados, coinciden en el tiempo e intentan utilizar los servicios habilitados en estas épocas del año (albergues, comida y ayuda económica) «para mantener un estilo de vida desordenado, sin responsabilidades y sin raíces».
El temporero, apunta Cáritas, «normalmente estará dispuesto a colaborar».
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