La secretaria de Estado de Inmigración y Emigración, Consuelo Rumí, ha advertido hoy de que la situación interna de Mauritania aumentará la llegada de cayucos y de inmigrantes ilegales a las costas españolas.

Tras la rueda de prensa de presentación de los Presupuestos del Ministerio de Trabajo e Inmigración para 2009, Rumí ha confirmado a los periodistas que el cayuco que arribó ayer a Tenerife con 299 subsaharianos a bordo procedía de Mauritania.

“Mauritania vive una situación interna muy compleja y se está convirtiendo en un punto de salida de los cayucos y de la inmigración clandestina”, porque "la colaboración con ese país ya “no es la que desearíamos”, ha lamentado.

Rumí ha subrayado que su Departamento y el Ministerio de Interior “están estableciendo todos los lazos necesarios para que Mauritania se estabilice” nuevamente y vuelva a trabajar con España “en la lucha contra las mafias, los traficantes y la inmigración ilegal”.

Sobre la llegada de inmigrantes a las costas españolas en septiembre, ha reconocido que se ha incrementado, aunque ha precisado que este repunte es habitual en los meses de septiembre porque las condiciones climatológicas “favorecen la salida de cayucos”.

Rumí ha subrayado que el Gobierno “mantiene, con el mismo celo, el control y la cooperación con los países de origen” y ha destacado la colaboración de Senegal desde que firmó el acuerdo de repatriaciones con España.

Por su parte, el ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, ha confirmado que mantiene sus planes de viajar a Senegal y Marruecos “antes de final de año” para impulsar la colaboración bilateral en materia de inmigración.

En cuanto a los presupuestos para el año que viene, la secretaria de Estado ha anunciado que el Ministerio destinará 440 millones a las políticas de inmigración y emigración.

El capítulo de Inmigración, destinado al control de los flujos migratorios y la colaboración con los países de origen, recibirá ocho millones de euros; el de emigración, 132 millones, y el de integración de inmigrantes 299 millones.

La mayor parte de la dotación de este último capítulo de gasto irá destinado al Fondo de apoyo y acogida de inmigrantes (200 millones), a la ayuda humanitaria y la integración (58 millones), a las ONG dedicadas a la asistencia de refugiados y solicitantes de asilo político (17 millones) y a Cruz Roja Española para la asistencia de inmigrantes a pie de playa (6 millones).