La economía de los migrantes guatemaltecos en EE. UU. no estará exenta de la crisis, lo cual se prevé que pueda repercutir en el envío de remesas y en pérdida de empleos.

Los connacionales no solo tienen que lidiar con el temor a las redadas y deportaciones; ahora deben aprender a vivir con la crisis económica que golpea a EE. UU., la cual comienza a afectar al sector laboral.

Maricela García, representante de Latinos United, explicó que el impacto de la crisis se ha vuelto evidente en toda la comunidad migrante, pues hay desempleo a todo nivel, por lo que muchos han perdido sus trabajos y a otros les han reducido el sueldo. “Esto afecta a los connacionales, porque no pueden mandar dinero a sus familias”, manifestó.

Expuso que los sectores más golpeados por la crisis son la construcción y los servicios de comida, actividades donde mayormente se desenvuelve la comunidad migrante.

“Los estadounidenses ya no quieren construir, mucho menos comer en restaurantes”, comentó la representante de Latinos United.

Según un estudio publicado por el Centro de Estudios de Inmigración, aproximadamente un millón de latinos han decidido retornar a sus naciones, debido a la escasez de trabajo y dinero.

“Muchos grupos culpan a los connacionales de la recesión que afronta el país, con la excusa de que les quitan el trabajo”, se quejó García.

Un migrante que lleva dos años de trabajar en construcción y remodelación de casas, en Nueva Orleans, dijo que los guatemaltecos tienen miedo, y algunos han decidido marcharse. “Yo no me voy; la situación en Guatemala está peor que aquí, por la ola de violencia y la escalada de precios”, señaló.

El vicecanciller Miguel Ángel Ibarra informó que, tras varias sesiones con agentes financieros de EE. UU., se estableció que lo peor de la crisis ya pasó, y que poco a poco todo irá regresando a la normalidad.

El funcionario comentó que, a pesar de la recesión, es curioso que las remesas no hayan disminuido —aunque no han crecido lo mismo que en el 2007—. “Las divisas han tenido aumento entre 6 y 7 por ciento, en agosto, y se debe al incremento de mujeres que han emigrado a EE. UU., porque envían casi todo lo que ganan, y de ahí el incremento”, refirió.