El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, afirmó que “no tiene sentido buscar albañiles en Rabat, si los de aquí están en paro” y señaló que coincide con la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, en que se debe hacer la contratación en origen que haga falta, “pero ninguna que no sea necesaria”. EFE/EUROPA PRESS. BARCELONA
 

En una entrevista publicada por el diario La Vanguardia, Corbacho matizó las declaraciones que hizo la pasada semana y dijo que, “mientras aquí tengamos albañiles magrebíes, ecuatorianos o españoles en el paro, no tiene sentido ir a buscar más albañiles a Rabat o a Quito”.

Corbacho, que se mostró de acuerdo con los sindicatos en que hay sectores, como el agrario, que están obligados a recurrir a este tipo de contratación, apuntó además que, a la hora de establecer la contratación en origen, “se tendrá en cuenta la realidad del actual mercado laboral español”.

Aun así, aseguró que el ministerio está pensando en “fórmulas de concatenación”, para que una persona pueda empezar la temporada en Andalucía y acabarla en Castilla La-Mancha, para lo que defendió incentivar la movilidad con ayudas económicas.

Retorno de inmigrantes

Se refirió también al decreto que pretende aprobar en octubre para incentivar el retorno de los inmigrantes, al que podrían acogerse personas que no hicieron la reagrupación familiar, en paro y que no tienen expectativas de encontrar trabajo a corto plazo.

“Con 9.000 euros y una experiencia profesional adquirida, quizá en su país de origen se les abre una perspectiva de más largo recorrido”, opinó Corbacho, que explicó que podrían acogerse a esta medida de 10.000 a 15.000 personas.

El ministro manifestó que “vienen meses duros”, pero también buenas oportunidades que se van a aprovechar, y añadió que los únicos salarios que se van a congelar son los de los cargos públicos electos, porque la congelación salarial llevaría a un aumento de la “conflictividad y a una mayor recesión del consumo”.

Corbacho explicó que, si la unidad de las fuerzas políticas catalanas tiene como finalidad que “caiga Zapatero”, no cree que ningún socialista se apunte.

El titular de la cartera de Trabajo e Inmigración apostó por una financiación “justa” para Cataluña que corrija el déficit del modelo actual, pues “no puede Cataluña tener un millón y pico de habitantes más y que eso no repercuta en la financiación”.

No obstante, dijo que el presidente de la Generalitat, José Montilla, hace lo que tiene que hacer, que es defender Cataluña por encima de todo. “Y eso le dignifica”, apostilló.

Para Corbacho, el proyecto socialista no es incompatible con la defensa de Cataluña y la mejora de la financiación, por lo que estimó que Zapatero y Montilla acordarán un sistema de financiación “que marcará el principio de un proyecto de futuro mejor para Cataluña”.