Sucesos
La familia del joyero asesinado cierra el local
El Mundo, , 01-09-2008Los parientes de Salam, el hombre degollado el sábado en Leganés, han decidido no abrir más el negocio. Los ladrones, de origen rumano, se llevaron todo lo que había en la caja fuerte y parte del botín que estaba en las vitrinas de la entrada a familia del joyero degollado el sábado en Leganés ha decidido cerrar el local «por un tiempo». Según fuentes cercanas a los parientes de Salam, el hombre asesinado de 55 años y de origen iraquí, «hasta que no pase un tiempo y nos centremos los parientes no abriremos la tienda».
Al parecer la decisión de cerrar el establecimiento se debe al cansancio de los familiares después de los constantes atracos que han sufrido. «Bastante nos han robado ya como para que sigamos abriendo», agregaban algunos parientes. De hecho, han avisado a todos sus clientes de que pasarán recoger las joyas por que no abrirán más.
El suceso se produjo en la avenida de Fuenlabrada 36, a las 10.30 horas, cuando Salam abría la joyería en el primer día de trabajo después de sus vacaciones. Dos hombres de nacionalidad rumana entraron en el local y robaron todo lo que había en la caja fuerte. Como el joyero opuso resistencia, los atracadores lo degollaron y lo apuñalaron hasta morir.
Fue tras la llamada de una vecina, dueña de la floristería contigua, que escuchó una pelea, cuando la policía se personó en la joyería Venya. El establecimiento se encontraba con las puertas cerradas, por eso los agentes no pudieron entrar hasta que no rompieron el cristal de la entrada. Ya en el interior, la Policía Local se encontró con el cuerpo del hombre fallecido.
«El cadáver tenía muchísimos golpes, la cara estaba muy hinchada», dijeron algunos de los amigos que pudieron ver el cuerpo. El tanatorio de Leganés estaba en la tarde de ayer «abarrotado de gente», dijeron algunos de los presentes. «Habrá como 200 personas», entre familiares, amigos y parientes muy allegados a Salam. El entierro se produjo a las 19.00 horas.
La policía encargada del caso, el grupo VI de Homicidios, sigue buscando a los autores del asesinato, ya que al parecer huyeron a pie y «tranquilamente», según algunos testigos. Como la propia joyería no contaba con cámaras de seguridad se están investigando los vídeos de los comercios cercanos, como el banco situado en el esquinazo de la avenida de Fuenlabrada con la avenida de la Universidad, lugar por el que al parecer huyeron los atracadores.
Algunos medios de comunicación han insinuado que el móvil del crimen pudo ser un ajuste de cuentas. «Pero eso es imposible, era un hombre excepcional», añadían ayer los amigos de Salam. Además, fuentes policiales han confirmado que los ladrones se llevaron un gran botín, la caja fuerte «quedó completamente vacía».
No era la primera vez que Salam sufría un atraco. Entraron a robarle varias veces y una de ellas con un butrón, pero «nunca con agresión», comentó un amigo.
LA POLICIA CUSTODIA LA JOYERIA DURANTE TODO EL DIA
Una patrulla de la Policía Nacional estuvo custodiando la joyería asaltada el sábado durante todo el día de ayer. El local, ubicado en la avenida de Fuenlabrada 36, se encuentra actualmente precintado y continuará así hasta que la policía determine lo contrario.
Ayer, los alrededores de la joyería Venya estaban de luto. Era domingo por la tarde y el silencio en la calle de la tragedia era profundo. La dependienta de la floristería contigua no quería hablar, decía que «estaba muy afectada».
En cambio, la empleada de la tienda de frutos secos, negocio separado de la joyería sólo por una agencia de viajes, mostraba su tremendo dolor. «Estas cosas sólo le pasan a las personas buenas», decía la señora con lágrimas en los ojos.
Todos los vecinos del barrio coincidían en que Salam, el hombre asesinado el sábado en su joyería, «era una bellísima persona». «Nunca tenía problemas con nadie», añadían sus allegados. Salam tenía mujer y dos hijos – de 18 y 21 años – y pertenecía a una familia de joyeros. Sus hermanos tienen otros negocios similares en el sur de Madrid, uno de ellos ubicado también en Leganés, en el Centro Comercial Avenida M – 40.
Por el momento, la joyería de la avenida de Fuenlabrada quedará cerrada, según indicó ayer mismo la familia.
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