| BARCELONA, España

El diplomático se negó a asistir a cita política de grupos de ecuatorianos en Cataluña.

Una reunión del movimiento PAIS que se realizó en Barcelona el pasado 1 de agosto generó un conflicto entre el presidente de la Federación de Asociaciones de Ecuatorianos en Cataluña (FAEC), José Vera, y el cónsul de Ecuador en Barcelona, Freddy Arellano, amigo  del presidente Rafael Corrrea.

Desde ese día, Vera y Arellano se han lanzado amenazas sutiles y frases conminatorias, a través de  cartas, que han puesto en alerta a la comunidad de ecuatorianos.

Incluso una asociación ajena al conflicto –la Federación de Entidades Ecuatorianas en Cataluña– pidió una reunión urgente con las partes implicadas para que se aclaren  los asuntos ventilados en las misivas.

“No se trata de acusar al Cónsul o a Vera. Simplemente, se mencionan hechos que merecen ser explicados a todos los ecuatorianos, y si hay algún responsable, tiene que ser sancionado”, indicó Alfredo Cedeño, presidente de esa agrupación.

El conflicto se inició cuando Vera invitó al Cónsul a participar en la convención de PAIS y este se excusó aduciendo que tiene la prohibición de acudir a reuniones políticas. Ahí surgió la primera confrontación verbal con el dirigente de los inmigrantes , quien le aseguró que quedaban rotas las relaciones de la FAEC y el Consulado.

Entonces, Arellano remitió una carta a las 22 entidades que aglutina la FAEC, diciéndoles que espera una ratificación escrita a lo dicho por Vera, “porque la rotura de relaciones implica que ninguna de las asociaciones tendrá algún tipo de relación con el Consulado y por ende con el presidente Correa, algo así como darle la espalda, motivo por el cual necesito saber si todas las asociaciones participan de este criterio, que como tal es respetable, para proceder a comunicar a los ministerios respectivos, Presidencia de la República y autoridades catalanas, todo esto para los fines correspondientes”, detalla el Cónsul en la misiva.

Vera replicó a Arellano con una carta del 6 de agosto, recordando que el Cónsul participó en una cita política convocada por el ex asambleísta de PAIS, Mario Cuzco, el 23 de julio pasado. También le recordó a Arellano que Cuzco se presentó un día en el Consulado, con un documento traído desde Ecuador, para que le den un cargo en esa entidad diplomática.

Otro de los cuestionamientos del dirigente de los migrantes se relaciona con la fiesta del 10 de agosto organizada por el Consulado en Barcelona.

“Nos parece oportunista que vísperas del 10 de agosto (Arellano) movilice los contactos de su asesor, Raúl Castro, para poder conseguir el auspicio de una promotora colombiana. Le preguntamos, ¿será porque (sic) hay de por medio algún asunto económico?…”.

Arellano dijo que su relación con el dirigente era muy buena y que más bien seguían impulsando muchas acciones a favor de los ecuatorianos asentados en la comunidad de Cataluña.

Es más, el diplomático aseguró que los actos relacionados con la fiesta del 10 de agosto pasado se realizaron con extrema pulcritud y que Raúl Castro –al que menciona Vera– no era empleado del Consulado. “Fue un asesor personal mío y es mi amigo”, aclaró.

Sin embargo, el asunto está caldeado, ya que Vera, en su misiva, lanzó una amenaza velada. “Sr. Freddy Arellano, en la convención se han sacado a relucir aspectos muy delicados y poco honorables de representantes de nuestro país…  todas esas denuncias las tenemos grabadas en video”.