España no aplicará la orden de retorno de inmigrantes

La vicepresidenta De la Vega tranquiliza a los iberoamericanos

La Vanguardia, ISABEL GARCIA PAGAN - Santo Domingo. Enviada especial , 08-08-2008

“Pueden estar absolutamente tranquilos, la directiva de retorno de la Unión Europea no se aplica ni se va a aplicar nunca, nunca, en España”. Con esa contundencia, María Teresa Fernández de la Vega se apresuró ayer en Santo Domingo a contener la preocupación en los países iberoamericanos sobre una posible política restrictiva de inmigración en España a raíz de la aprobación de la nueva normativa europea.

La vicepresidenta del Gobierno recaló ayer en la capital dominicana, en la segunda escala de su gira estival por Iberoamérica, donde tuvo que emplearse a fondo en sus explicaciones sobre la política migratoria del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero. Y es que la polémica directiva de retorno de inmigrantes protagonizó la agenda de la vicepresidenta durante toda la jornada. Primero en un encuentro en el instituto para la promoción de la mujer de las Naciones Unidas y después en una conferencia sobre políticas migratorias en el Centro Cultural de España.

De la Vega no dejó lugar a las dudas: “Que quede bien claro, no hay ningún cambio” en la política del Gobierno español, más allá de los ajustes que vengan obligados por la crisis económica y que ya han llevado al Ministerio de Trabajo e Inmigración a presentar medidas como el plan voluntario de retorno de los inmigrantes en situación de desempleo. Un plan que busca dar respuesta – según De la Vega- a la situación de especial vulnerabilidad de los inmigrantes debida la nueva coyuntura económica, que afecta especialmente a sectores en los que tradicionalmente se ha concentrado el empleo de trabajadores extranjeros, como es el caso de la construcción.

La vicepresidenta admitió la incomodidad del Gobierno con los planteamientos aprobados en la Unión Europea y resaltó que la actual legislación española es “infinitamente más garantista”. Por ello, consideró que la directiva “no es aplicable”, y mucho menos a inmigrantes iberoamericanos, ni en España ni en el resto de países europeos.

De la Vega exhibió una política migratoria consensuada con los agentes sociales, y a la que llamó a sumarse a los partidos de la oposición, basada en la lucha contra la inmigración ilegal, que, en ningún caso, puede guiarse por un “afán represor”. En el lado contrario, como ejemplo de voluntad de integración, presentó la iniciativa de promover el voto de inmigrantes en las elecciones municipales. En este sentido, confirmó que está previsto que el Gobierno nombre a finales de agosto, en el primer Consejo de Ministros del curso, al embajador especial para negociar los convenios de reciprocidad con los países interesados en esta iniciativa.

Pero al margen de lanzar un mensaje de tranquilidad sobre la política de inmigración, la vicepresidenta tuvo especial interés en que su primer acto en Santo Domingo fuera un encuentro con mujeres ante las que exhibió el compromiso del Gobierno de Zapatero con la igualdad. Como ejemplo, anunció una ampliación de 3,5 millones de euros para la línea de microcréditos de la Agencia Española de Cooperación al Desarrollo, en esta ocasión destinados sólo a mujeres, y del que ya se han beneficiado 15.000 dominicanas. Y aún más, De la Vega anunció la contribución de un millón de euros extras para el instituto internacional de las Naciones Unidas para la promoción de la mujer.

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