El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, indicó ayer desde Pekín que el Gobierno español «siempre» mantendrá el «mejor nivel de relaciones» con el país mauritano, si bien dejó claro que apuesta por una «Mauritania democrática, que asuma su responsabilidad y respeto».

Ésta fue su respuesta ante la pregunta de si el Ejecutivo Zapatero pensaba romper las relaciones con Nuakchott. Eso sí, el ministro condenó una vez más el golpe militar. «En ningún momento lo podemos aceptar». Y destacó que el objetivo número uno es que la colonia española, que se calcula en torno a 150 personas, continúe en buen estado.

De cualquier forma se pretende proseguir con los acuerdos ya establecidos. En este sentido, España ha incrementado su ayuda oficial a Mauritania en los últimos años. Hace dos semanas Zapatero y el depuesto Abdallahi firmaron en Madrid un tratado de cooperación en la lucha contra la inmigración ilegal.

De ahí que un contingente de la Guardia Civil permanezca en Nuadibú donde realiza patrullas conjuntas con las fuerzas mauritanas para controlar la salida de cayucos hacia las costas españolas.