Dos niños de entre dos y tres años murieron y fueron arrojados al mar durante la travesía, según relataron algunos inmigrantes que llegaron ayer a bordo de una barcaza a las costas de Lampedusa, la isla más meridional de Italia, informó la Guardia Costera.

Esta barca de nueve metros de eslora, en la que viajaban 75 inmigrantes, entre ellos 11 mujeres, fue interceptada cuando navegaba a 46 millas de las costas de la isla.

Según la Guardia Costera, los inmigrantes de origen africano se encontraban en precario estado de salud, tras haber pasado en el mar unos cinco días.

Los niños murieron debido al hambre y las duras condiciones del viaje, según relataron los inmigrantes adultos.

En las ultimas horas se han intensificado los desembarcos a las costas italianas debido al buen estado del mar, y ayer llegaron a la isla siciliana un total de 230 inmigrantes en varias embarcaciones y 150, entre argelinos y marroquíes, desembarcaron en la isla de Cerdeña.