Dos niños, entre dos y tres años, murieron y fueron arrojados al mar durante una travesía en barcaza hacia costas italianas, según relataron algunos inmigrantes que llegaron ayer a la isla italiana de Lampedusa, la más meridional de Italia, según informó la Guardia Costera.

La embarcación, de nueve metros de eslora y en la que viajaban 75 inmigrantes – entre ellos, 11 mujeres – , fue interceptada cuando navegaba a 46 millas de la isla. Los inmigrantes de origen africano estaban en precario estado de salud, tras haber pasado en el mar unos cinco días. Los supervivientes relataron que los niños murieron debido al hambre y las duras condiciones del viaje.

En los últimos días se han intensificado los desembarcos a las costas italianas debido al buen estado del mar, y ayer llegaron a la isla siciliana un total de 230 inmigrantes en varias embarcaciones y 150, entre argelinos y marroquíes, desembarcaron en Cerdeña, informa Efe.

El Gobierno italiano declaró el viernes el estado de emergencia en todo el país tras duplicarse la llegada de sin papeles en el primer semestre de 2008 respecto al año anterior, con 10.611 personas, frente a las 5.378 del mismo periodo del año pasado.

Una declaración del Parlamento explica que el estado de emergencia, que otorga a la policía y a las autoridades locales poderes adicionales, fue extendido a todo el país para combatir la «persistente y excepcional» llegada de ilegales.

La medida del Gobierno Berlusconi, que ganó las elecciones de abril prometiendo mano dura con la inmigración ilegal a la cual culpa de los delitos, fue inmediatamente atacada por la oposición. «Así, sólo se aumenta la preocupación e inseguridad de la gente, justo lo contrario de lo que se debería hacer», dijo Marco Minniti, del Partido Democrático.

Según Médicos Sin Fronteras, la llegada de sin papeles a Lampedusa ha crecido un 30% respecto a 2007 , pero es estable frente a años previos.