La búsqueda de los cuerpos de los 14 inmigrantes arrojados al mar tras perecer en la patera en la que emprendieron la travesía hacia la Península, durante la que otra inmigrante murió, aunque su cuerpo fue trasladado a puerto, ha sido suspendida por las “remotas” posibilidades de obtener resultados.

Así lo ha explicado un portavoz de Salvamento Marítimo, organismo coordinador del operativo de búsqueda que se activó durante la tarde del jueves, que ha señalado que no han recibido instrucciones por parte de la Subdelegación del Gobierno para proseguir con las tareas, por lo que, en principio, éstas han concluido de forma definitiva.

Este portavoz ha justificado la suspensión del operativo en las “remotas” posibilidades de encontrar algún cuerpo, dado el tiempo transcurrido desde la llegada de la patera, que fue rescatada a 27 millas al sur del Faro Sabinal durante la noche del miércoles.

La imprecisión para establecer el lugar en el que pudieron ser arrojados los cuerpos los supervivientes navegaban sin patrón, perdidos y merced de las corrientes así como la falta de datos sobre la fecha en la que se produjeron las primeras muertes, han dificultado en extremo las tareas de rastreo.

Han sido dos jornadas de búsqueda por mar y aire en las que se han llegado a peinar 350 millas cuadradas en torno al lugar en el que se localizó la patera y, también, en una amplia zona al levante de Almería, todo ello sin obtener el más mínimo resultado.

Durante la madrugada del jueves llegaron al puerto de Almería los 33 supervivientes, entre ellos un bebé, de una travesía que se inicio entre los días 3 y 4 de julio en Alhucemas (Marruecos), donde embarcaron 48 personas, catorce de las cuales perecieron en el trayecto, mientras que otra mujer murió durante el rescate por parte de la Guardia Civil.