LA INSEGURIDAD ciudadana sigue creciendo. Cada día aumenta el número de delitos de todo tipo en nuestras islas, tanto los de violencia de género, robos, drogas, etc., como daños personales, cometidos en su mayoría por inmigrantes, que tienen que sobrevivir en unas islas donde el paro sigue creciendo.

Cada vez son más numerosos los inmigrantes menores de edad, en una callada invasión de las islas, fenómeno al que nuestros políticos, nuestros gobiernos, han dado la espalda.

Tal y como se está actuando, esa marea humana irá a más y la inseguridad también, con lo cual – como ya he apuntado en varias ocasiones – nuestra principal fuente económica – el turismo – puede hundirse en un abrir y cerrar de ojos.

Y cuando esto ocurra ¿qué será de nosotros, de nuestras islas? La miseria será aún mayor que la que ya tenemos.

Y no soy pesimista, ni xenófobo, pero Bruselas está pasando del tema. Madrid, también, y nuestros políticos, también. Lo que preocupa es la batalla entre partidos, inquietos principalmente por no perder votos.

Esta incompetencia está dando lugar a que el independentismo siga creciendo en Canarias, con gran alegría por parte de Marruecos, que lleva años queriendo llevar a su huerto al Archipiélago.

Y los canarios, tocando la flauta, ¡aplatanados! (Nunca mejor dicho).

Ya se habla de que las pensiones pueden peligrar, y que hay que apretarse el cinto, pero sigo diciendo que tenemos unos políticos incompetentes. Mientras nos “dicen” que hagamos un uso responsable del agua, de la electricidad, del petróleo, etc., se mantienen luces sobrantes tanto en túneles como en edificios oficiales, alumbramiento de calles, utilización de vehículos oficiales, amén de romerías y tenderetes, y no digamos de la TV Canaria.

Eso sí, en esa batalla por el poder, y en ese afán de “cuidar” la imagen, a falta de fútbol (están de vacaciones), se gastan los dineros públicos en traer conjuntos musicales ¡de fuera! (cuando tenemos de aquí), carnavales, bicicletas y demás que ayuden a olvidar el paro, el pago de la hipoteca, el hambre de muchos canarios…

No perdamos de vista que ya se está recomendando el uso responsable del agua, y que utilicemos – en la medida de lo posible – el transporte público, aunque no sé si tal vez actuemos como que “eso no va conmigo”.

Creo que la gravedad de la situación exige soluciones rápidas y drásticas, merecedoras de que los canarios y quienes vivimos en Canarias salgamos ordenadamente a la calle, en manifestación, exigiendo soluciones tanto del Gobierno central como al autonómico. Y si ni siquiera saben exigir. Si no son capaces de “despertarnos”, de hacerse oír en el Parlamento nacional, dimitan.