Mientras que la natalidad gallega se estanca y no puede corregir la sangría que suponen las defunciones en una comunidad envejecida, en el resto del país el indicador coyuntural de fecundidad – que en demografía mide el número medio de hijos por mujer en edad fértil – pasó del 1,38 en el 2006 al 1,39 el año pasado. De esta forma, continúa la recuperación sostenida de la fecundidad en España y alcanza su valor más elevado desde 1990.

Así, durante el 2007 hubo 491.183 nacimientos, 8.226 más que los registrados el año anterior. El peso de los inmigrantes en este aumento de la natalidad es innegable: los nacimientos de madres extranjeras aumentaron un 16,4% y alcanzaron los 92.992. Esta cifra supuso además el 18,9% del total de nacimientos en el 2007. A modo de ejemplo del cambio que ha supuesto el colectivo inmigrante en la natalidad española, las mujeres con nacionalidad marroquí fueron las que más hijos tuvieron (20.058), el 21,6% del total de nacimientos de madre extranjera.

Por el contrario, la tasa de mortalidad subió, pasando del 8,43 en el 2006 al 8,57 del año pasado. La mayoría de los fallecimientos en la población extranjera tuvieron lugar en el colectivo de nacionales de países miembros de la Unión Europea (un 72,7%), que suelen ser los extranjeros residentes con edad más avanzada, pues deciden vivir en España después de su jubilación. Por países destacaron el Reino Unido y Alemania, cuyos ciudadanos fallecidos representaron el 24% y el 13% del total, respectivamente.

Durante el año pasado se celebraron 203.697 matrimonios, 4.069 menos que en el 2006, mientras que el número de casamientos entre personas del mismo sexo fue de 3.250, el 1,6% del total. En 2.180 matrimonios ambos cónyuges eran varones, y en 1.070, mujeres.

En Galicia hubo 77 matrimonios del mismo sexo, 52 entre varones y 25 entre mujeres. En el resto de España, el 3,7% de los matrimonios con al menos uno de los cónyuges extranjero se llevó a cabo entre personas del mismo sexo.