El pago por desempleo se ha comido en cinco meses más de la mitad del presupuesto previsto para el año El gasto en prestaciones por desempleo ascendió el pasado mes de mayo (último dato disponible) a 1.535 millones de euros. Lo que supone un incremento del 30,8% con respecto al mismo mes de 2007, según datos del Ministerio de Trabajo e Inmigración.

Transcurridos los cinco primeros meses del año, el aumento del paro se ha comido más de la mitad de los 15.500 millones de euros presupuestado por el Gobierno para este pago.

De continuar esta tendencia de destrucción de empleo, la caja del INEM habilitada para este pago se acabará en octubre. Será cuando el Gobierno tendrá que echar mano al excedente de tesorería acumulado y procedente de los ejercicios anteriores cuando el empleo iba como un tiro.

Según fuentes del ejecutivo este colchón es de unos 4.000 millones, y con ellos se podría llegar hasta fin de año. Sin embargo, ante las previsiones de que todavía falta por llegar la parte más dura del ajuste económico y de empleo, en los presupuestos para 2009, que han comenzado ya a elaborarse, se incrementará sustancialmente esta partida de gasto.

Según los datos facilitados ayer por Trabajo, correspondientes a mayo, había 1.644.951 beneficiarios de prestaciones por desempleo, un 23% más que un año antes.

El gasto medio mensual por beneficiario, incluidas las cotizaciones a la Seguridad Social y sin incluir el subsidio agrario de Andalucía y Extremadura, fue de 990,7 euros, 41 euros más (4,4%) que en el mismo mes del año anterior.

En este mes se solicitaron 426.391 prestaciones de desempleo, un 21,3% más que en mayo de 2007 y se tramitaron 410.048 altas (un 21,6 % más).

El número de beneficiarios extranjeros fue de 168.748 personas, un 85,4% más que en 2007. El incremento fue superior en los procedentes de países no comunitarios (85,6%). Representan el 10,3% del total de los beneficiarios de prestaciones por desempleo. El gasto de sus prestaciones fue en este mes de 145,5 millones de euros, casi el doble (un 96,8%) que en 2007. Sobre el gasto total de las prestaciones, sigue creciendo y se sitúa ya en el 9,5 .

El ‘ladrillo’ destruye 150.000 empleos en 1 año

Hace un año la construcción todavía creaba empleo. Ahora, los despidos están a la orden del día. Y queda el verano, cuando suelen acabar las obras, si las hay, o cuando se envía a casa a los trabajadores para no cotizar por ellos durante las vacaciones.

En junio de 2007 estaban registrados en el INEM 216.895 parados en el sector. En el mismo mes de 2008 son ya 370.208. Es decir, hay 153.313 desempleados más. Su crecimiento es de casi el 71 (supera en cuatro veces el incremento del paro en los servicios y tres veces en la agricultura). La mitad de estos despidos se han producido desde principios de año (77.411).

El ajuste del desempleo en junio respecto a mayo fue en este sector un 6,04% (la media del país fue del 1,57%). Se trata del tercer registro más alto desde que comenzó la desaceleración en el verano pasado (en diciembre de 2007 llegó al 12,84% y en agosto llegó al 9,65%).

En cuanto a la afiliación a la Seguridad Social, el ‘ladrillo’ acumula ya una caída de la ocupación de 265.860 personas en el último año (con un decrecimiento del 13,5%). Se trata de la mayor reducción entre los sectores que pierden cotizantes en términos interanuales.

Duplicado el paro entre inmigrantes en 12 meses

El paro se está concentrando en la construcción, donde abundan en número los extranjeros.

De los 36.849 trabajadores que engrosaron la lista de desempleo de junio, 9.973 procedían del exterior. Su transición al desempleo es cuatro veces más elevada que en el resto del país. Así, si en junio se incrementó en un 1,57% el número total de parados, mientras que el de los foráneos creció un 4,01%.

En total, el número de inmigrantes en paro sumaban en este mes 258.800 personas. Y su crecimiento es más que exponencial. En sólo un año ha aumentado en nada menos que 110.246, es decir, un 74,2%.

De esos 258.800, un 28% procede ya de la construcción (72.224), aunque es en el sector de servicios donde se registra su mayor número (125.189, casi la mitad del total de desempleados).

En cuanto a la afiliación de este colectivo, su presencia en las cotizaciones de la Seguridad Social bajó en junio en 17.517 personas, de los que 14.871 procedían de países de la Unión Europea y 2.646 eran no comunitarios.

En total, los extranjeros inscritos en el sistema se situaron en 2.128.384 ocupados.

El despido se ceba en los hombres

El paro discrimina entre hombres y mujeres. Está sucediendo desde hace unos meses. Pero sobre todo en junio. Y demuestra la brutalidad del ajuste ya que, cuando se masculiniza el desempleo, significa que las empresas han optado por despedir a quienes más antigüedad acumulan y más sueldo tienen. Ha empezado la operación abaratamiento de los costes salariales (en general las mujeres han llegado más tarde al mercado laboral, tienen menos antigüedad y sueldo y también más bonificaciones a la hora de la contratación).

Por sexos, la subida del desempleo en junio afectó en mayor medida a los hombres, con 31.659 desempleados más (un 3,1% más que en el mes anterior), mientras que el paro femenino registró un ascenso de 5.190 mujeres (un 0,39% más).

De esta forma, el número de parados varones se mantuvo por encima del millón y se situó al finalizar junio en 1.051.418 y el de mujeres alcanzó la cifra de 1.339.006.

Hace un año, había 742.690 parados hombres y 1.223.179 mujeres. Es decir, hay 424.555 parados más ahora, de los que 308.728 son hombres y 115.827 mujeres.