«Histórica» operación en la UE contra una de las mayores redes de inmigración ilegal

Diario Vasco, 24-06-2008

Una red de inmigración ilegal a Europa organizada por kurdos iraquíes fue desmantelada ayer en una operación calificada de «histórica» por su magnitud, llevada a cabo de forma coordinada y simultánea por policías de nueve países europeos, informaron hoy las autoridades. La llamada Operación Bagdad, coordinada por Europol y Eurojust, permitió el arresto de 75 personas, todas ellas presuntos miembros de la red, en Alemania, Bélgica, Francia, Grecia, Holanda, Irlanda, Noruega, Reino Unido y Suecia.

Un récord de casi 1.300 agentes participaron en la operación, de los cuales 300 en Francia, país que estuvo en el origen de la investigación hace aproximadamente un año y medio, a partir de informaciones facilitadas por los británicos.

Entre los 25 arrestados en Francia, unos 17 o 18 eran «grandes organizadores» que se han enriquecido «mucho», manifestaron ayer fuentes policiales.

Los detenidos en Francia, de edades comprendidas entre los 21 y los 48 años, son de origen iraquí, iraní, marroquí, tunecino, argelino, mauritano, turco y francés, indicó la Fiscalía de París.

Fuentes policiales destacaron el carácter «histórico» de la «operación Bagdad» a nivel europeo por su magnitud. También era la primera vez que se desplazaba un equipo de Europol a un país para una operación de este tipo. Agentes de Europol se instalaron con sus equipos en la sede de la Oficina Central para la Represión de la Inmigración Irregular y del Empleo de Extranjeros Sin Permiso (OCRIEST), que estaba a cargo de la operación en Francia.

La red introducía en Europa a inmigrantes clandestinos kurdos iraquíes, pero también de otras nacionalidades: iraníes, afganos, paquistaníes, chinos y bengalíes.

Según la Fiscalía, esta red trasnacional y «estructurada», «animada» por nacionales iraquíes, enviaba a los inmigrantes ilegales hacia el Reino Unido e Irlanda, por una parte, y, por otra, hacia Suecia y Noruega, vía Bélgica, Holanda, Alemania y Dinamarca.

Los investigadores han determinado que varios centenares de inmigrantes han conseguido entrar de forma clandestina en países europeos mediante el pago a la red de entre 10.000 y 12.000 euros. Otras fuentes cifraron el precio del pasaje más bien en 15.000 euros y dijeron que en un período de seis meses cerca de un millar de inmigrantes clandestinos entraron por medio de esa red, lo que suma 15 millones de euros. El dinero pagado no sale del Kurdistán iraquí, explicaron fuentes de la investigación, al explicar que los miembros de la red en Francia eran pobres pero riquísimos en casa. Los detenidos se enfrentan a penas de hasta 10 años de prisión y 750.000 euros de multa.

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