Cuatro inmigrantes llegados a Tenerife el pasado martes en un cayuco que arribó al puerto de Los Cristianos han muerto en distintos centros hospitalarios de la Isla y otros 13 permanecen ingresados, según fuentes de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, quienes justificaron ayer el retraso en informar de estos fallecimientos en la Ley de Protección de Datos y en la intimidad de las personas, cuando, por desgracia, se ignora su nombre y su procedencia y son enterrados con lápidas sin identificación.

Los fallecidos llegaron a Tenerife el día 17 en un cayuco en el que viajaban 82 inmigrantes, 74 adultos y ocho posibles menores, y fueron trasladados a distintos centros hospitalarios. Dos murieron en el Hospital Universitario de La Candelaria (Santa Cruz), uno en el Hospital Universitario de Canarias (La Laguna) y otro en el Centro El Mojón (Arona).

Asimismo, ayer permanecían ingresados otros 13 inmigrantes en los distintos centros de la Isla. Diez de ellos en La Candelaria, cuatro ya en planta, uno en la Unidad de Vigilancia Intensiva (UVI) y cinco en Urgencias.

A estos se añaden dos inmigrantes más en el centro especializado de El Mojón, en Arona, dependiente de La Candelaria. Otro seguía ayer ingresado en planta del HUC, aunque evoluciona favorablemente, según señalan las mismas fuentes.

Según Frontex, un 26% menos de inmigrantes han llegado a las costas canarias en el último año. Un responsable del dispositivo señaló que “la cooperación entre las administraciones africanas tanto de Senegal como de Mauritania ha sido la principal razón para este descenso”.

Reconoció que “ha sido una bajada progresiva, aunque en febrero hubo un repunte” que volvió a descender progresivamente.