BERNARDO SAGASTUME. LAS PALMAS
Cuatro de los casi 500 inmigrantes clandestinos llegados en las últimas 48 horas a Canarias murieron entre el martes y ayer, en medio de una nueva oleada de embarcaciones clandestinas que desde las costas africanas lograron alcanzar las del Archipiélago.
Han sido siete los cayucos, y tocaron los puertos de tres islas distintas, Tenerife, Gran Canaria y El Hierro, adonde transportaron a 463 personas, entre ellas unos cincuenta menores y tres mujeres, dos de ellas también menores, presumiblemente.
El buen tiempo y las condiciones favorables para la navegabilidad del mar en estos días han permitido que los cayucos consiguieran llegar a las costas del archipiélago canario con una media de 66 pasajeros cada uno, apiñados en los escasos quince metros de eslora que miden en promedio estas embarcaciones construidas originalmente para la pesca en el litoral del África subsahariana.
«Hace tiempo que no veía algo tan imponente», señaló a ABC Austin Taylor, voluntario de la Cruz Roja en el sur de Tenerife, respecto de cómo estaban los inmigrantes del cayuco en que viajaban los cuatro hombres que más tarde murieron en dos hospitales de la isla. Al menos 13 de ellos siguen ingresados. Por el tipo de embarcación y su testimonio se sabe que provenían de Mauritania.
«Llegaron en muy pero muy mal estado», dijo Taylor, quien indicó además que muchos de ellos presentaban un cuadro de deshidratación e hipotermia por la larga travesía y en algunos casos se observó alteración de la conducta.
Según el testimionio recogido por los voluntarios que dan los primeros auxilios en tierra, muchos de ellos llevaban unos cinco días en total viajando, tres de ellos en el agua.
De las siete embarcaciones llegadas a las Islas en las últimas 48 horas, la última arribó ayer al mediodía al puerto de Los Cristianos, transportando a 72 inmigrantes en aparente buen estado de salud, según informó la Delegación del Gobierno, entre los que se encontraban 49 adultos y 22 posibles menores. Entre los adultos había una mujer y entre los posibles menores, dos niñas.
Unas horas antes había llegado otro cayuco, que había sido avistado el miércoles por el Servicio Aéreo de Rescate (SAR) de Salvamento Marítimo cuando navegaba a 54 millas al sur de Tenerife.
Protección de datos
La Consejería de Sanidad de Canarias no ha facilitado detalles sobre el estado de salud de las personas ingresadas, ni el tipo de afección que padecen. Las muertes de los inmigrantes se conocieron un día después de ocurridas debido a que la Consejería de Sanidad ha decidido no facilitar información del estado de los inmigrantes en aplicación de la ley de protección de datos y para garantizar la intimidad de las personas, según la explicación oficial ofrecida a Efe.
Sólo cuando la agencia de noticias se puso en contacto con la Consejería fue cuando se confirmó que los fallecidos el miércoles eran cuatro, tras haber adelantado el periódico local La Gaceta en su edición de ayer que había un muerto.