| ESTRASBURGO, Francia

Cuestionamientos.

El Parlamento Europeo debate hoy la polémica Directiva de Retorno de los inmigrantes indocumentados en la Unión Europea (UE) y las enmiendas al texto presentadas por varios grupos políticos.

La ley establece retenciones a los irregulares de hasta 18 meses antes de su expulsión y sin retorno a la  UE por 5 años.

Cuestionada por el Vaticano, la Comisión de Episcopados de la Comunidad Europea, activistas y algunos partidos políticos, el plan obliga a las autoridades en la UE a elegir entre legalizar a los sin papeles o expulsarlos.

Esta expulsión o “alejamiento”, como pretende llamarlo Bruselas, debe ser “dentro de lo posible voluntario”, aunque en caso contrario se reconocerá el uso de la fuerza como una necesidad, con la posibilidad de recurrir a un periodo de detención de 6 a 18 meses.

La Directiva Retorno se enmarca en un proceso de organización y endurecimiento de la política migratoria de la UE que debería acentuarse durante la futura presidencia francesa del bloque en el segundo semestre del 2008, con un “pacto europeo” impulsado por París.

El pacto tendría como ejes principales un “contrato de integración” que incluye aprendizaje obligado de la lengua nacional para quienes quieran llegar a Europa, el fin de las regularizaciones masivas y una política común de asilo.

Ayer, en Bogotá, grupos no gubernamentales y académicos latinoamericanos, reunidos en un foro continental, rechazaron el proyecto.