VIOLENCIA EN LAS CALLES / Fuenlabrada

Detenidos dos porteros de un bar acusados de matar a un joven magrebí

El Mundo, CARLOS MEDRANO, 08-06-2008

Abderrazak, de 19 años, recibió tres puñaladas. La policía ha detenido también a dos amigos de la víctima MADRID. – La ola de violencia que azota el sur de Madrid no cesa. Si hace quince días degollaron a un joven en la Cubierta de Leganés, esta vez le ha tocado el turno a la localidad madrileña de Fuenlabrada. Durante la madrugada de ayer sábado, un joven encontró la muerte tras recibir varias puñaladas en la zona más popular de marcha de todo el municipio. La víctima, Abderrazak K, era un joven marroquí de 19 años que se enzarzó en una pelea con el personal de seguridad de un bar de copas en el número cuatro de la calle Plaza. Los testigos afirmaron que el fallecido intentó acceder sobre la una de la madrugada al local acompañado de unos amigos, también magrebíes, pero los porteros del establecimiento les impidieron la entrada originándose una fuerte discusión que acabó en tragedia. La policía detuvo en el mismo lugar de los hechos a cuatro personas: dos de los amigos de Abderrazak y la pareja de porteros del local que participó en la disputa.


Efectivos del Summa se personaron en el lugar pero no pudieron hacer nada para salvar la vida del herido y certificaron allí mismo su defunción. La víctima había recibido tres cuchilladas, dos en el glúteo y otra en la parte izquierda del pecho, la cual resultó mortal.


Testigos presenciales declararon que el altercado tuvo lugar a las puertas del bar El Cortijo y que, tras comenzar los golpes, otros «puertas» se sumaron a la pelea. No obstante, el joven no murió allí, sino que aún tuvo tiempo de tambalearse en busca de refugio hasta un local de copas próximo, el Kemia, en la calle Mártires, donde expiró a consecuencia de sus lesiones. Un reguero de sangre señalaba con claridad a los investigadores el agónico recorrido que realizó el joven antes de desplomarse en el interior del bar.


De momento, las sospechas recaen sobre los dos porteros que se enfrentaron en un principio a los jóvenes marroquíes, dado que a ambos se les encontraron armas blancas con las que, presuntamente, podrían haber agredido a Abderrazak. Por otro lado, varios de los protagonistas de la pelea ya estaban fichados por las autoridades. La Jefatura Superior de Policía informó a Efe que el joven muerto tenía antecedentes policiales por robo con fuerza y pesaba sobre él una orden de detención. Asimismo, el español Carlos José O.E., de 29 años, uno de los porteros del bar donde se originó la pelea, ya había tenido que rendir cuentas en otras dos ocasiones por robo con fuerza. Tras la muerte de Abderrazak, se le encontró un cuchillo oculto en su pantalón cuando se le estaba atendiendo en el hospital de Fuenlabrada de las heridas que sufrió durante la pelea.


Una navaja en el calzado


El otro portero detenido, Oscar N.B. de 30 años, es español y no tenía antecedentes pero, cuando los agentes procedían a detenerle, actúo de forma extraña al fingir un desmayo con el objetivo de deshacerse con disimulo de sus zapatillas, arrojándolas debajo de un vehículo. Los agentes le descubrieron y encontraron en el interior del calzado una navaja. Ahora, será lo policía científica la encargada de dilucidar si alguna de las armas intervenidas fue usada en el curso de la agresión que terminó con la muerte de Abderrazak.


De los dos amigos del fallecido que también han sido detenidos, sólo uno tenía antecedentes policiales. Se trata de Houssani B., de 26 años, que había sido detenido en varias ocasiones, por vulnerar la llamada ley de extranjería, por robo con violencia y por robo o hurto de uso de vehículo.


Este individuo había utilizado en el pasado varios nombres distintos para eludir la orden de búsqueda que pesaba sobre él. El otro compañero que se encuentra a disposición judicial es el marroquí Thami F., de 24 años. En este caso, el sujeto no tenía causas pendientes con la Justicia.


«No hay racismo»


El suceso ha sorprendido a los vecinos. Fuenlabrada es un municipio en el que abundan los inmigrantes , pero los habituales de la zona de bares donde falleció el joven afirmaron que «no suele haber problemas de racismo». Una amiga de los dos porteros detenidos se mostró asombrada con lo sucedido y aclaró que el grupo de marroquíes «andaba buscando gresca porque ya se les había negado en otra ocasión la entrada al garito». En ese sentido, declaró estar «conmocionada» con el suceso y puso en duda que las armas fueran del personal de seguridad del local. «Los conozco y son muy sensatos, uno de ellos tiene una hija pequeña. En realidad eran los marroquíes los que iban armados y los del local de copas les quitaron las armas. Por eso uno de los puertas acabó en el hospital con un corte en la mano», aseguró.


Esta versión difiere con la que ofreció un testigo de origen magrebí que, además, conocía al fallecido. «Los seguratas les provocaron haciéndoles gestos insultantes. Cuando se desencadenó la pelea todos los porteros cercanos se unieron a la paliza que se estaban llevando mis paisanos», concluyó. Ahora le corresponde al Grupo sexto de Homicidios de la Brigada Provincial de la Policía Judicial esclarecer que pasó.


Por su parte, el Ayuntamiento de Fuenlabrada informó que el fallecido era vecino del municipio y apuntó que los hechos ocurrieron en la zona centro, donde en el año 2000 se aprobó una ordenanza municipal que prohibe otorgar más licencias para la apertura de locales de este tipo en la zona, con el fin de evitar una mayor concentración de estos establecimientos.


Segundo chico muerto en el Sur en dos semanas


Cada vez es más frecuente que las salidas nocturnas de los jóvenes madrileños terminen en tragedia. Con la de ayer ya son dos las muertes violentas de jóvenes en el Sur de la Comunidad en dos semanas. El pasado 24 de mayo un joven moría apuñalado en la garganta después de una reyerta que comenzó en el pub Malibú, ubicado en la zona de copas de la Cubierta de Leganés.


Los hechos tuvieron lugar a las 5.30 horas de la madrugada, exactamente después de que el dueño fuera multado por sobrepasar la hora de cierre. Todo comenzó cuando dentro del susodicho local un individuo propinó un botellazo en la cabeza a un amigo del fallecido. Inmediatamente, se originó una pelea que continuó en el exterior, y que concluyó con la muerte de Bruno S.O., que pereció degollado a unos 200 metros del establecimiento, en el museo de escultura al aire libre.

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