Pasado mañana a las 19.30 horas, una manifestación organizada con el lema Basta de Inmigración. Limpiemos Torrent, recorrerá las principales calles de la capital de l’Horta Sud.

Pese a los esfuerzos por impedir que se celebrara esta marcha racista, la Delegación de Gobierno no ha podido objetar nada y no ha podido prohibirla, ya que “el derecho a manifestarse está recogido en la Constitución y no se han visto indicios de delito a priori”. Así lo manifestó el recién elegido delegado del Gobierno, Ricardo Peralta, en una carta remitida hace unos días a la alcaldesa de la localidad, María José Català.

Desde que el pasado 23 de mayo Alianza Nacional convocara la manifestación, la Policía Nacional ha investigado a este grupo convocante, mientras que partidos políticos y asociaciones se mostraban contrarios a su celebración.

Un informe de la Policía Local de Torrent recomendaba que no se autorizara. Tanto el Bloc primero como posteriormente el equipo de gobierno popular han acudido a la Fiscalía para tratar de impedir que se celebre.

Además, grupos políticos, asociaciones y entidades de todo tipo se unieron para firmar un manifiesto en contra del racismo, en el que además rechazaban cualquier tipo de manifestación como la que se celebra este sábado en las calles de la ciudad.

Torrent se convertirá, por un día, en el escenario de una marcha que se iniciará en la plaza Obispo Benlloch, frente al Ayuntamiento, recorrerá la principal calle de la ciudad, la avenida del País Valencià, y terminará en la plaza de la Libertad. A su paso por la plaza de Moralets se encontrará con un acto cultural, organizado por grupos de izquierdas.

Los actos programados consisten en una Muestra de Folclore con bailes, “coincidiendo igualmente por su ubicación con la señalada como inicio y transcurso de la manifestación de Alianza Nacional”, hizo constar el Ayuntamiento de Torrent en el último escrito enviado a la Delegación de Gobierno. “No es una contramanifestación”, aseguran, ya que estaba convocada con anterioridad.

Sin embargo, fuentes de esta delegación criticaron que el Consistorio no haya comunicado con anterioridad que se iba a celebrar este acto a la misma hora y prácticamente en el mismo lugar de la manifestación de ultra derecha.

El Ayuntamiento de Torrent ha presentado mil objeciones ante la Delegación de Gobierno, pero finalmente se celebrará esta manifestación que, según el escrito firmado por la alcaldesa “está provocando en los ciudadanos de Torrent, principalmente en una parte significativa constituida por la población inmigrante, una situación de temor que pudiera ser constitutiva de delito o falta conforme a las determinaciones del Código Penal, que contempla el delito de amenazas”.

“Alianza Nacional está provocando a la discriminación, al odio o a la violencia contra grupos o asociaciones, por motivos racistas”. El delegado del Gobierno, Ricardo Peralta, se mostró completamente de acuerdo con la opinión de la alcaldesa, pero explicó que no pueden impedir la marcha.