La Sección Cuarta de la Audiencia Nacional ha ordenado al juez Fernando Andreu que investigue la querella presentada contra Salvamento Marítimo por un delito de homicidio imprudente. El caso trata de la supuesta responsabilidad de dos de sus remolcadores en el fallecimiento de 88 inmigrantes que viajaban en una patera hundida en las proximidades de las costas de Canarias en julio de 2007, según informa Europa Press.

El magistrado rechazó en octubre admitir a trámite la querella, al considerar que la conducta de los capitanes y tripulaciones de los barcos – el Conde de Gondomar y el Luz de Mar – «no crearon el riesgo» que desembocó en el fallecimiento de los ocupantes del cayuco, sino que «pretendían evitarlo».

No obstante, la Sección Cuarta considera que «no debe proceder rechazar de plano la querella», que denunciaba la negligencia de las tripulaciones y la ausencia de dispositivos flotantes que hubieran reducido el número de ahogados. Sólo 48 de los 136 inmigrantes lograron salvarse después de que uno de los remolcadores, con una maniobra brusca, hiciera volcar el cayuco y luego chocara con él, partiéndolo en dos.

Los magistrados de la Sección indican al juez Andreu que debe solicitar a la autoridad marítima de Canarias que le remita las diligencias levantadas a raíz del rescate fallido. «A la vista de ello, y con libertad de criterio del juzgado instructor para la práctica de las diligencias complementarias que considere procedentes, se podrá decidir con mayor conocimiento si continuar con la tramitación de la causa o archivarla», indica el auto.