El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, anunció ayer en el Congreso de los Diputados que una de sus “primeras visitas” oficiales será a Canarias para “sentar las bases” y “concertar las políticas más adecuadas para la gestión del fenómeno de la inmigración”.

A instancias de la diputada del Grupo Parlamentario Popular María del Carmen Guerra, Corbacho manifestó su “preocupación” respecto de la situación de Canarias y afirmó haber hablado con el presidente regional, Paulino Rivero, para acordar la anunciada próxima visita.

En cuanto a su papel como gestor de la cartera de inmigración, Corbacho señaló que no hará “una política diferente de la que hizo” su antecesor en el cargo, Jesús Caldera, y reiteró su disposición a desarrollar la misma “con el concurso del mayor consenso de todas las formaciones políticas y sociales”.

Por su parte, la diputada “popular” recriminó a Corbacho la gestión de Caldera y afirmó que con el ex ministro se pasó “de papeles para todos, a un millón y medio de personas que hay en estos momentos en la calle de manera irregular”.

Asimismo, criticó el reciente viaje de la vicepresidenta Primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, a Nigeria: “Lo único que nos ha traído es una foto con unos polígamos que exhiben a sus mujeres”, aseveró.

Respecto al primer asunto – la gestión de Caldera – , Corbacho sentenció que el Gobierno socialista “nunca ha pedido papeles para todos” y, sobre la vicepresidenta, reiteró que su viaje es fruto de unas “imprescindibles” relaciones bilaterales con los países a los que “queremos” que vuelvan los inmigrantes que no tengan contrato de trabajo.