EL GOBIERNO ITALIANO SE ESTRENA

La Eurocámara condena los ataques a gitanos en campamentos italianos

El comisario de Igualdad se compromete a vigilar las nuevas leyes de Berlusconi

La Vanguardia, , 21-05-2008

LAIA FORÈS – Bruselas. Servicio especial

LA EURODIPUTADA GITANA “El Gobierno italiano es muy firme con los débiles y muy débil con los fuertes”
El dramático caso de Italia, donde en los últimos días se han sucedido violentos ataques contra campamentos de gitanos en Nápoles y Roma, ha destapado un nueva situación de racismo hacia una comunidad casi siempre estigmatizada. Así lo ven los diputados del Parlamento Europeo, cuyos principales grupos condenaron ayer las graves agresiones sufridas por los gitanos en Italia, en un acalorado debate celebrado un día antes de que el ministro del Interior italiano, Roberto Maroni, lleve al Consejo de Ministros el paquete de seguridad que prevé tipificar como delito la inmigración ilegal.

Aunque algunos eurodiputados se esforzaron para que el debate no se convirtiera en un juicio al Ejecutivo de Berlusconi, la mayoría de las intervenciones fueron para rechazar su actuación.

“El Gobierno italiano parece muy firme con los débiles y muy débil con los fuertes, debería preocuparse sobre todo de la Camorra”, dijo Victoria Mohácsi, eurodiputada liberal húngara. Mohácsi, que es gitana, visitó hace unos días los campamentos afectados en Italia y denunció la violación de derechos humanos que sufre la comunidad romaní. Y ayer acusó en el debate a las autoridades italianas de utilizar a esta minoría “como cabeza de turco” para eludir otros problemas que vive el país.

Roberto Musacchio, eurodiputado italiano de Izquierda Unitaria Europea, recordó al Gobierno de Berlusconi que todos los socios europeos están obligados a respetar las normativas comunitarias y acusó a Berlusconi de utilizar el miedo a los gitanos para ganar votos. “Así se envenena la convivencia y se destruye la democracia”, advirtió.

Si en algo están de acuerdo la izquierda y la derecha europeas es en que el rechazo hacia la comunidad gitana es un problema común a todos los países europeos. “El problema no es italiano, el grado de integración de las minorías es insuficiente en la UE”, afirmó el presidente del grupo socialista, el alemán Martin Schulz. En el mismo sentido se expresó la húngara Lidia Jaroka, del grupo popular: “Tanto los gobiernos de la derecha como los de la izquierda se han mostrado incapaces de fomentar la integración de la población romaní”.

El diputado Luca Romangnoli, del partido de extrema derecha italiano Llama Tricolor, propuso sin ningún pudor la creación de un “Estado para los gitanos” para poner fin a la marginación de la comunidad. “Mejoraría su calidad de vida y, si me lo permiten, también mejoraría la nuestra”, dijo el diputado. Ante la estupefacción de gran parte del hemiciclo por las palabras de Romangnoli, el socialista italiano Claudio Fava replicó que esta propuesta “no es original, porque ya la hizo Goebbels en los años treinta”.

El debate fue precedido por un discurso del comisario europeo de Asuntos Sociales e Igualdad, Vladimir Spidla, mucho más contundente de lo que había sido hasta ahora la respuesta – tímida y prudente- de Bruselas a los incidentes de Italia. Spidla dijo que “la Comisión rechaza de forma categórica toda estigmatización de los romaníes y su identificación con la delincuencia”. El comisario se comprometió a vigilar que las leyes que prevé aprobar Italia en relación con los inmigrantes respeten la normativa europea. “La lucha contra la criminalidad debe hacerse en pleno respeto al Estado de derecho”, advirtió.

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