Hamza B., el ciudadano marroquí que en la noche del 30 de diciembre de 2007 se saltó un control policial en su coche y fue perseguido de manera espectacular por el vehículo de la policía local en pleno centro de la ciudad, tiros al aire incluidos, se encuentra en paradero desconocido, según confirmaron a este periódico fuentes judiciales.

El magistrado instructor ordenó su ingreso en prisión al día siguiente de que sucediera la persecución, pero en enero la Audiencia revocó la orden al considerarla injustificada, ya que el acusado carecía de antecedentes, se encontraba legalmente en España y tenía domicilio conocido.

Ayer, el Juzgado notificó el auto que transforma las diligencias previas en procedimiento abreviado. El juez considera que los hechos pudieran ser constitutivos de un delito de atentado, otro contra la seguridad y un tercero de tráfico de drogas, aunque este cargo no figuraba inicialmente. Según fuentes de la investigación, Hamza B. portaba aquella noche una piedra de hachís de unos 120 gramos. La defensa alegará consumo personal.