Dos aspectos clave definen el perfil actual de la sociedad riojana: su envejecimiento y el fenómeno de la inmigración, que alcanza en la Comunidad el 12% de la población (dos puntos más que la media nacional) y que «ha recompuesto la estructura y pirámide poblacional». Este último hecho advierte asimismo de la necesidad de «estudiar algo tan complejo como la inmigración de forma mucho más profunda, más detallada, huyendo de los conceptos generales». Son palabras de Mauricio Beltrán, director del Instituto de Estadística de La Rioja, que representan a su vez una de las conclusiones que arrojó ayer el primer Foro ‘Estadística y Progreso en la Sociedad del Conocimiento’, celebrado en el Centro Cultural Caja Rioja-La Merced, y congregó a profesionales y expertos de estadística, empresa y administración.

Con el objeto de mostrar la estadística como utensilio para planificar políticas sociales, económicas, educativas o empresariales, el foro consistió en dos mesas de trabajo, sobre demografía y empresa. Así, la primera valoró lo que ha supuesto el incremento de la inmigración en educación, servicios sociales y gastos para cubrir sus necesidades, y se arrojaron conclusiones tales como que «un inmigrante crea empleo, consume y se inscribe en la Seguridad Social. No sólo consume servicios, sino que también es productor de trabajo», indicó Beltrán. La segunda trabajó sobre las encuestas industrial y del servicio, que «dan unos datos muy precisos de la estructuras contables de las empresas, cuáles son mas competitivas y porqué, o cómo es nuestro comercio exterior».

La jornada fue inaugurada por el presidente del Gobierno regional, Pedro Sanz, y el consejero de Hacienda, Juan José Muñoz. Sanz animó a «apostar» por la estadística como «instrumento fundamental para planificar y asegurar el desarrollo de la sociedad».