bilbao. Un 33% de los latinoamericanos asentados en la CAV desea quedarse definitivamente en el País Vasco, mientras que un 22% lo haría en caso de que se dieran las condiciones adecuadas. Asimismo, la similitud cultural, propiciada por la misma religión y mismo idioma, hace que estos inmigrantes cada vez se sientan más integrados. Así se recoge en el informe presentado por el Observatorio Vasco de Inmigración, Ikuspegi, en el que se ha encuestado a 1.557 inmigrantes latinoamericanos para radiografiar al perfil de la población inmigrante en Euskadi durante el pasado año.

El 50% de los extranjeros en el País Vasco son latinoamericanos, que constituyen el colectivo más veterano ya que el 65,4% de sus miembros lleva residiendo entre dos y seis años. Las nacionalidades más asentadas y veteranas son Ecuador y Colombia, mientras que la población boliviana destaca por su reciente llegada: el 56,3% de los bolivianos lleva residiendo en el País Vasco menos de dos años.

Atendiendo a su situación legal el 51,5% de los inmigrantes con situación regular, tiene intención de quedarse definitivamente, mientras que el 20,6% con situación irregular también se asentaría en Euskadi para siempre. La inserción laboral de los sudamericanos también es superior a la del conjunto de los extranjeros. El 76,9% de los latinoamericanos en Euskadi se encuentra trabajando, frente a un 13,6% que está en paro. El nivel de ocupación es superior para los ecuatorianos – un 84,3% trabaja – y para los argentinos.

En cuanto al nivel de estudios es de destacar la situación de los argentinos, de los que el 34,4% dispone de estudios universitarios y un 54,7% de estudios secundarios.

Atendiendo a la relación entre la población inmigrante y la población autóctona, el informe de Ikuspegi revela que las dinámicas de intercambio social y de interrelación son mayores, aunque a medida que la relación es más íntima ésta tiende a reducirse.

El 58,2% de los encuestados afirman relacionarse “bastante” o “mucho” con los vascos, aunque predominan con un 64,5% las relaciones con la gente del propio país. El estudio revela que a medida que las relaciones son más íntimas éstas se establecen más entre los propios compatriotas, así el 54,8% de los inmigrantes afirman que sus amigos son sus paisanos, frente a un 12,5% que dicen tener amigos vascos.

El contacto con el país de origen también sigue manteniéndose, de tal forma que el 92% de los sudamericanos confiesan llamar por teléfono a sus familiares que se han quedado allí. Asimismo el 68% de los inmigrantes encuestados dicen enviar dinero a sus familias, siendo la cantidad media enviada de 263 euros al mes, principalmente a través de locutorios, y es que un 60% utiliza este método de envío.

nexos de unión La religión y el idioma son dos de los factores que más integran a los latinoamericanos en Euskadi y entre las prácticas culturales vascas que más practican se encuentra la comida, las fiestas y la ropa, mientras que prefieren escuchar la propia música de origen que la que se escucha en el País Vasco.

El director de Inmigración del Gobierno vasco, Roberto Marro, valoró “muy positivamente” los datos de la encuesta ya que “revelan tanto que los inmigrantes cada vez se sienten mejor aquí, como que los vascos los aceptan más”. Asimismo Marro lamentó los casos de discriminación “leve” que manifiesta la encuesta, y en este sentido señaló que “tenemos que aprender a manejar la diferencia”.

“Eso significa que cada vez se sienten mejor aquí y que además son mejor aceptados”

roberto marro

Director de Inmigración