Gwinnett es una de las jurisdicciones de Georgia con mayor población hispana. Pronto su Policía tendrá facultades para colaborar con el ICE, el brazo deportador.

Con ningún voto en contra, la junta de comisionados de Gwinnett, uno de los condados de mayor población hispana en Georgia, aprobó la semana pasada ser parte del programa 287 (g), que otorga facultades migratorias a los agentes del departamento local del Alguacil.

Lorraine Greene, una de las principales promotoras de dicho proyecto, aseguró que a pesar de ser un programa costoso, vale la pena. Es la única manera de expulsar de esta comunidad a todos los indocumentados que podamos, según declaraciones que publicó el diario Gwinnett Daily Post.

Aunque las autoridades no revelaron cuándo comenzarán a aplicar el programa, indicaron que empezarían por revisar los expedientes de los reclusos que permanecen en las cárceles del condado.

Este programa será posible gracias a $5 millones aprobados por los comisionados. Estos mismos fondos servirán para entrenar a los oficiales para que puedan identificar cuando un inmigrante es indocumentado y sobre cómo empezar los procesos de deportación.

En 2007, la cárcel de Gwinnett admitió a 12,030 presos extranjeros de un total de 39,000. La mayoría de los foráneos que son arrestados enfrentan cargos por violaciones menores de tránsito, como no portar una licencia de conducir válida del estado y muchos por manejar bajo los efectos del alcohol, entre otras cosas.

Richard Rocha, portavoz de la Oficina de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), dijo que el plan 287 (g) equipa a las autoridades locales de todo el país con las herramientas y capacidad para detectar inmigrantes indocumentados en los centros de detención.