El alumnado extranjero no universitario se ha triplicado en cinco años

Diario Sur, SUR, 30-03-2008

El alumnado extranjero no universitario se ha triplicado en Andalucía durante el primer lustro del siglo XXI al pasar de 22.494 alumnos matriculados en el curso 2001/2002 a 66.758 en el 2006/2007. Por provincias, Málaga es la que tiene más alumnado extranjero en este curso, con 23.204.

Un tercio de ese alumnado procede la de UE ampliada (27 estados miembros) y otro tercio de América del Sur, mientras que una quinta parte es nativa de algún país africano, según un estudio del Centro de Estudios Andaluces sobre la inmigración y realizado por el Instituto de Estudios Sociales Avanzados (IESA).

Primaria es el nivel educativo con mayor número de alumnos extranjeros (44%), seguido de Secundaria (39%) e Infantil (16%). No obstante y pese al fuerte aumento en pocos años, la presencia de inmigrantes en el sistema educativa andaluz no es, en términos generales, muy elevada.

La integración en las aulas de la población inmigrante o hijos de inmigrantes se acompaña en Andalucía de medidas complementarias, como por ejemplo la divulgación de folletos en varios idiomas acerca del derecho a la escolarización o las aulas temporales de adaptación lingüísticas que fomentan el aprendizaje del español.

El informe hace una advertencia en el sentido de que la escolarización universal de los niños inmigrantes no garantiza por sí sola la integración social exitosa. En este sentido, alerta de que se detectan diferencias en la distribución del alumnado inmigrante entre centros de titularidad pública y privada (concertados), ya que se suelen concentrar en los públicos: «Este hecho podría acentuar la división social entre ambos tipos de centros educativos».

Incidencia

Además, esto a su vez tendería a perjudicar la calidad de la enseñanza impartida en los centros públicos por motivos lingüísticos de una parte de ese alumnado acelerando la huida de los que otorgan mucha importancia una enseñanza de calidad.

No obstante, señala que los niños de los inmigrantes no están peor capacitados académicamente que los de padres autóctonos. El estudio apuesta por conseguir una elevada calidad de la enseñanza, unas altas tasas de permanencia en el sistema y unos buenos resultados académicos, con independencia de la procedencia del alumnado, más que equilibrar la ratio de extranjeros en los distintos centros.

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