MADRID. Una mujer de 54 años murió ayer en la localidad almeriense en Albox presuntamente a manos de su marido enfermo, que le disparó con una escopeta con la que posteriormente se quitó la vida, y una joven marroquí de 27 fue puñalada mortalmente en Tarragona por un joven que la acosaba. La Delegación Especial del Gobierno de Violencia sobre la Mujer trataba ayer de contrastar do si estas dos muertes se pueden encuadrar dentro de la negra estadística de violencia machista.

Una portavoz de la Delegación de Gobierno de Violencia sobre la Mujer explicado que en el caso de Tarragona «no hay plena constancia de que existiera una relación sentimental» entre verdugo y víctima, por lo tanto no se trataría de violencia machista.

Según la ley contra la violencia de género, este tipo de violencia es la que, como manifestación de la discriminación, la situación de desigualdad y las relaciones de poder de los hombres sobre las mujeres, se ejerce sobre éstas por parte de quienes sean o hayan sido sus cónyuges o de quienes estén o hayan estado ligados a ellas por relaciones similares de afectividad, aun sin convivencia.

Sanae Haddadi, de 27 años y origen magrebí, apuñalada mortalmente en Tarragona, había rechazado al menos en dos ocasiones mantener una relación sentimental con su presunto agresor, según aseguraron fuentes de la investigación. Estas mismas fuentes indicaron que la familia de la víctima relató a los investigadores que el presunto agresor, también de origen magrebí, se había obsesionado con la chica y le había pedido que saliera con él, a lo que ella se había negado.

Por su parte, el subdelegado del Gobierno en Tarragona, Joan María Abelló, pedió «prudencia» y manifestó que «parece ser que entre víctima y presunto agresor no existía ningún tipo de relación sentimental», si bien «todas las hipótesis están abiertas».

En el segundo caso, ocurrido en Albox, la enfermedad mental que sufría el presunto autor del crimen, J.J.A., parece haber motivado el crimen, explicó la portavoz de la Delegación del Gobierno contra la Violencia sobre la Mujer.

En el mismo sentido, el alcalde de la localidad almeriense, José García Navarro, manifestó que el agente de el agresor, agente la Policía Local, de 61 años, que se suicidó tras matar presuntamente a su mujer de madrugada llevaba 18 meses de baja por depresión, estado al que atribuyó el «trágico desenlace» del matrimonio.

El alcalde indicó que al agente, que residía junto a su esposa y sus dos hijos en la barriada de Los Segovias El Cañico, tras ser dado de baja le fueron retiradas las armas reglamentarias, y que este estado se había «agudizado» en los últimos días.

Durante los últimos meses, el hombre había sido tratado de su depresión por el servicio de Salud Mental de Albox.

En lo que va de año han muerto 16 mujeres a consecuencia de la violencia machista y otras cuatro están bajo investigación, entre las que se incluyen estos dos últimos fallecimientos.

Arrestado en Vitoria. La Er – tzaintza detuvo a última hora de la tarde del jueves en la capital alavesa a JJ.G.G., varón de 33 años de edad, como presunto autor de un delito de violencia machista, ya que acudió al lugar de trabajo de su antigua compañera sentimental y allí la agredió, causándole lesiones en la cabeza. Los hechos ocurrieron a las diez y veinte minutos de la noche, cuando los ertzainas fueron requeridos para que se dirigieran a la Avenida de los Huetos de la capital alavesa ya que, al parecer, se estaban registrando unas agresiones en una de las empresas ubicadas en la zona. Una vez en el lugar, los ertzainas contactaron con una mujer que estaba sentada en la acera en evidente estado de nerviosismo y que presentaba un golpe en la cabeza.

Tras interesarse por lo ocurrido y solicitar una ambulancia para atender a la víctima, los policías se dirigieron a una empresa cercana en la que se había escondido el presunto agresor, JJ.G.G., quien fue detenido acusado de la comisión de un delito de violencia de género. AGENCIAS