Las autoridades brasileñas negaron en las últimas horas la entrada al país de otros cinco turistas españoles, con lo que ya son trece los que han sido rechazados desde la semana pasada, en lo que el gobierno brasileño ha calificado de «medidas de reciprocidad».

Los españoles, al igual que un italiano, fueron enviados de regreso a sus países el fin de semana por las autoridades migratorias del aeropuerto de Salvador porque no tenían pasaje de vuelta, una de las exigencias que impone Brasil a los extranjeros, confirmaron fuentes de la Policía Federal. Estas negativas de admisión se sumaron a las sufridas por ocho españoles en el mismo aeropuerto la semana pasada y ocurrieron después de que el Ministerio de Exteriores expresó a España su malestar por los problemas que muchos brasileños han tenido en Barajas. El malestar se desencadenó la semana pasada, cuando a una treintena de ciudadanos de este país se les impidió entrar a España porque no cumplían los requisitos necesarios para ingresar a la UE.