La detención de tres inmigrantes fue «un espectáculo policial-mediático»
Gara, , 05-03-2008SOS Racismo no duda en calificar de «espectáculo policial – mediático» la detención, el pasado 14 de febrero, de tres ciudadanos argelinos residentes en Gasteiz. Tras su violenta detención y posterior puesta en libertad, quienes fueron objeto de esta operación policial aseguran que nadie de Interior se ha dirigido a ellos para pedir disculpas. Por su parte, Interior de Lakua niega haber cesado a los responsables de la operación, aunque reconoce «cambios de destino».
Han tenido que pasar dos semanas para que los tres ciudadanos de nacionalidad argelina que fueron detenidos por la Ertzaintza en Gasteiz se hayan atrevido a relatar públicamente su experiencia. Aun así, sólo dos comparecieron ayer ante los medios de comunicación, no sin miedo de que Inmigración actúe y acabe de rematar la tarea iniciada por la Ertzaintza.
Fede García, portavoz de SOS Racismo en Araba, calificó ayer la operación policial en la que estos tres ciudadanos fueron detenidos de «espectáculo policial – mediático», porque la Ertzaintza acudió acompañada de cámaras, se difundieron a bombo y platillo acusaciones difusas de colaboración con el islamismo y al final, «el tiempo se ha encargado de resolverlo».
Los tres ciudadanos fueron puestos en libertad al día siguiente de su detención por el juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande – Marlaska. Desde entonces, «nadie les ha pedido excusas, nadie les ha dado explicaciones, nadie les ha apoyado», se quejó Fede Garcia, recordando que SOS Racismo defendió desde el principio que las detenciones respondían a un «montaje falto de base alguna y de credibilidad».
Tras esta operación, según denunciaron ayer, el locutorio y los jóvenes detenidos fueron «objeto de la mala fe de ciudadanos que, al hilo de las noticias, manifestaban su incomodidad con estas personas, porque el racismo y la xenofobia, latentes en esta sociedad, sólo necesitan de aparentes verdades, que luego son falsedades, para reactivar el rechazo». Por eso, SOS Racismo pide «precaución y prudencia».
Dos de los detenidos, que fueron puestos en libertad sin cargos, relataron ayer, visiblemente nerviosos a pesar del tiempo transcurrido, cómo se produjeron las detenciones. «Entraron en las viviendas de forma violenta, reventando las puertas con explosivos, apuntando con sus armas, encapuchados, sin dar explicaciones…».
La dueña del locutorio que registraron, y compañera de uno de los detenidos, dijo que llevan dos años y medio trabajando todos los días de la semana para levantar un negocio que, tras estas detenciones, podían haber perdido, «si no llega a ser por el apoyo de la gente, clientes, vecinos… que nos conocen y han creído en nosotros».
Pero el daño producido es irreparable, sobre todo por el miedo de los dos detenidos que no tienen regularizada su situación. Porque, recordó Fede García, «no tener papeles es muy grave, son personas más vulnerables, porque si Extranjería les pone la mano encima van a tardar dos segundos en abrirles el expediente de expulsión». Ese va a ser ahora el objetivo de SOS Racismo: «intentar legalizarles, que regularicen su situación».
SOS Racismo cree que este tipo de operaciones policiales es fruto de la «histeria garzoniana», por la que la presunción de inocencia ha pasado a la historia para dar paso a la «presunción de culpabilidad».
Cese o «cambio de destino» de los responsables del arresto
El pasado sábado, «El Correo» publicó que el Departamento de Interior de Lakua ha cesado a tres responsables policiales de la detención de los ciudadanos argelinos en Gasteiz. Achacaba esta medida a que la forma en la que se había realizado la operación y la falta de pruebas contundentes «provocaron un fuerte malestar en la Audiencia Nacional». Entre los sancionados, según la información, figuraban el responsable de las relaciones con los juzgados centrales y ertzainas de la Unidad de Información y Análisis.
El mismo día, Interior hizo pública una nota en la que negaba que hubiera habido cese, sino «cambios de destino» sin relación con las detenciones. Además, justificaban la operación del 14 de febrero «por motivos policiales y de investigación que son conocidos en su totalidad por la Audiencia Nacional». Finalmente, el departamento que dirige Javier Balza negaba que existiera «malestar alguno en la Audiencia Nacional».
Cese o cambio de destino, el hecho es que las expectativas generadas por Interior con estas detenciones decayeron al día siguiente con la puesta en libertad sin cargos de los tres ciudadanos. Ayer, éstos aseguraron que no interpondrán denuncia y que consideran de justicia el cese de los responsables de la operación en la que fueron apresados. Tx. A.
(Puede haber caducado)