México. (EFE). – Legisladores mexicanos y canadienses condenaron hoy la construcción del muro que el Gobierno estadounidense edifica en su frontera con México. En el marco de la XV Reunión interparlamentaria México – Canadá, que se celebró hoy en la ciudad de Mazatlán, en el oeste del país, las delegaciones de ambos países acordaron elaborar un “manifiesto” contra el muro, indicó la Cámara de Diputados mexicana en un comunicado.

De manera conjunta, el senador mexicano Santiago Creel, en representación del Congreso de México, y el presidente de la Cámara de los Comunes de Canadá, Peter Milliken, expresaron su rechazo a la construcción del muro fronterizo que EE.UU. planea elevar sobre 1.126 kilómetros de su frontera, con el principal propósito de frenar el cruce de indocumentados y el tráfico de drogas.

Creel indicó que el acuerdo “es una señal más de que el muro debe rechazarse, debe suspenderse su construcción y abrirse un canal de diálogo, que es lo que necesitan los dos países”. Durante la reunión los legisladores mexicanos plantearon varios temas como el respeto a los derechos de los trabajadores mexicanos. La idea, según el diputado mexicano Gilberto Ojeda, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), es que los mexicanos que trabajan en Canadá sean tratados con dignidad, puedan aspirar a tener salud, capacitación y seguridad, y no sólo sean vistos como “mano de obra barata”.

Los políticos también defendieron la importancia del Programa de Trabajadores Agrícolas Temporales, que desde 1974 regula el ingreso a Canadá de jornaleros mexicanos, y propusieron considerar su ampliación para que los mexicanos puedan trabajar también como “prestadores de servicios”. Al respecto, la canciller mexicana, Patricia Espinosa, señaló en declaraciones a la prensa que el Programa de Trabajadores Agrícolas Temporales podría ampliarse a otras áreas geográficas de Canadá y a otros sectores de actividad económica de ese país.

“Podría ser también un programa que incluyera algunas áreas de servicios como restaurantes u hotelería, donde (los canadienses) necesitan mucha fuerza laboral”, sostuvo Espinosa. Según la titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores, los gobiernos de México y Canadá trabajan sobre la posibilidad de modificar el programa de trabajadores temporales, aunque afirmó que “sería realmente muy difícil y aventurado” estimar cuándo podrían tomar una decisión el respecto. Durante el encuentro se trataron además asuntos relacionados con la seguridad regional, competitividad, migración y turismo.