Más de tres de cada 10 pacientes atendidos en las Urgencias del hospital de Poniente, en El Ejido (Almería), son extranjeros. “El porcentaje es alto, pero no porque haya una demanda anormal”, afirma Tomás Elorrieta, jefe del servicio de Urgencias de este centro. “La afluencia de inmigrantes es destacable”, añade, “pero sin duda proporcional” al número de habitantes de origen extranjero de este municipio que, según los últimos datos del censo, representan algo más del 32% de la población.

Nada más entrar en la amplia sala de espera del área de Urgencias de este hospital, donde poco más de 20 personas aguardan su turno, una adolescente del cercano municipio de Berja, que acompaña a un amigo que se ha lesionado el hombro, aprecia que “hay muchos más extranjeros que españoles”. “Al final, seremos nosotros los que nos tendremos que marchar”, afirma.

La rotundidad de estas palabras contrasta con la visión que ofrece la sala, donde no más de cuatro personas de origen extranjero esperan ser atendidas. En ese momento atraviesan la puerta de entrada dos mujeres y dos niñas de origen marroquí residentes en la pedanía de las Norias. “Es una tontería, no hay más que ver esta sala”, afirman antes de sentarse a esperar su turno. Frente a este grupo, Paqui, ejidense de toda la vida aquejada de un fuerte dolor en la mano, ratifica estas palabras y sentencia “esto siempre ha ido igual de lento”.