La provincia de Málaga ocupa el primer puesto a nivel regional en interrupciones voluntarias de embarazos. Además, una de cada tres mujeres que abortan en Málaga ya lo han hecho antes al menos una vez, lo que evidencia que algo falla para evitar los embarazos no deseados. Según los expertos, esto se debe a dos cuestiones: por un lado, que las campañas de información sexual no terminan de calar en la población, sobre todo juvenil, y, por otro, que los inmigrantes demuestran en algunos casos conductas contrarias al uso de los métodos anticonceptivos. Por ello, se hace necesaria una reflexión por parte de las autoridades sanitarias sobre el modo en que se desarrollan los planes de información sexual, que no terminan de calar en el sistema educativo y la sociedad en general.