POR ERENA CALVO

LAS PALMAS. «La España socialista sigue siendo El Dorado, todos los sondeos dan como ganador a Zapatero en marzo de 2008. Es probable que si no realiza una regularización masiva como la última sí que dé con facilidad permisos de residencia a los senegaleses. Tened en cuenta que ha promovido la puesta en marcha de cupos de trabajadores de Senegal a su país».

Esta recomendación forma parte de una larga lista de consejos para emigrar a Europa, «sin el peligro de un viaje en cayuco», lanzados a través de una página web: www.senegalaisement.com. Desde 2006, este portal dedicado al Turismo viene publicando toda una serie de guías para el «gran éxodo» a Europa: bodas de conveniencia, reagrupación familiar, viajes de estudiantes sin vuelta a casa o cruzar el Atlántico a bordo de un cayuco.

La libertad, a 1.800 euros

Ahora, presentan – «después de realizar una amplia investigación» – el «paquete eslavo polaco enero 2008: más caro, pero sin riesgos». Necesitan unos 1.800 euros (los salarios del 80 por ciento de la población en Senegal no superan los cien euros al mes), el pasaporte y un visado de alguno de los países europeos que aún no forman parte del espacio Schengen. Conseguir un visado para uno de estos países, destacan, exige muchos menos requisitos que los de los países de la «Europa libre». Ahí está la clave. «Muchas regiones de Europa del Este – continúan desde la web – todavía no aplican políticas restrictivas en materia de inmigración y continúan abiertos a los visitantes africanos». Moldavia y Bielorrusia serían una buena opción, señala, «por ser frontera colindante con el espacio Schengen».

Eslovenia, Polonia, Albania, Montenegro, Serbia, y Rusia y Croacia en último término, serían otras posibilidades para iniciar el viaje. «Hay que aprovechar el momento, porque cada vez son más los países adheridos al espacio Schengen», advierten.

Para preparar el viaje, señalan, hay que tener varias cosas en cuenta. «Desde Dakar no se puede coger ningún vuelo a la zona que nos interesa, hay que hacer escala en algún aeropuerto del espacio Schengen, y en algunos de ellos a pesar de permanecer en el área internacional del aeropuerto pueden demandarte un visado de tránsito». Es el caso, recoge la página, de Italia, Francia, Portugal o Lituania.

Iberia y Air Europa, Lufthansa o Brussels Airlines son las compañías «para viajar a España, Alemania o Bruselas y enlazar con otros destinos desde los que penetraremos al área eslavo polaca». Recomienda que el tiempo de espera en el primer aeropuerto sea lo más corto posible.

Corrupción, a la orden del día

«Una vez en la zona convenida, la entrada en la «Europa libre» es muy sencilla. Recordad que muchos de estos países viven todavía en la Edad Media», continúan, para añadir que «la corrupción está a la orden del día, y con un puñado de rublos en el bolsillo de un policía todo se soluciona rápido».

Pasar la frontera escondido en un vehículo, contando con la complicidad de algún conocido, o hacerlo campo a través en zonas rurales sin ningún control son las propuestas que ofrecen para alcanzar la Unión Europea (UE).

Pero también propone solicitar, una vez allí, una tarjeta de residencia en países como Croacia, «que podrían adherirse en breve a la Unión y en los que a veces conseguir los papeles es muy fácil».

Si lo consigue, «cuando se integre en la Unión Europea usted podrá vivir y trabajar en los países que la componen y sacar provecho de todas las prestaciones sociales».

Lo cierto es que, cada vez más, se detectan movimientos no sólo de subsaharianos, también de magrebíes, según fuentes consultadas relacionadas con la lucha de la inmigración irregular, que buscan en esta vía una solución para salir de sus países tras el blindaje de la costa africana.

En los últimos meses, informan fuentes diplomáticas de Senegal, se están incrementando los controles en los aeropuertos. «Y ahora vamos a reforzarlos con un nuevo pasaporte que nos permitirá conocer todos los pasos de sus propietarios». Además, señala, «revisamos los visados de los pasajeros, para comprobar si son falsos; vamos por detrás de las mafias que siempre buscan los resquicios del sistema».